Sindicatos del sector público quieren salir nuevamente a las calles si se aplican recortes salariales

Petr Nečas y Jaroslav Zavadil, foto: ČTK

Los sindicalistas del sector público se preparan para realizar nuevas manifestaciones en caso de que el oficialismo no tome en cuenta sus reivindicaciones. Reaccionan así a la insistencia del Gobierno checo de reducir en un 10 por ciento los sueldos de los empleados estatales a partir del próximo año.

Los sindicalistas se declararon en estado de alerta de huelga porque no están de acuerdo con el cambio del sistema de remuneraciones. Así lo dijo este martes el líder sindical, Jaroslav Zavadil, en una reunión con el primer ministro, Petr Nečas. “El Gobierno insiste en la reducción salarial del 10 por ciento a partir del año 2011, pero está dispuesto a conservar algunos aspectos del sistema salarial actuals”, recalcó Nečas.

Petr Nečas,  y Jaroslav Zavadil,  foto: ČTK
“Estamos dispuestos a seguir buscando con los sindicalistas una solución de compromiso. No obstante, no cambiaremos de postura en cuanto al monto total de la baja salarial que debe ser del 10 por ciento. Pero es posible que hallemos alguna forma más aceptable de cómo aplicar los recortes en los sueldos de los empleados públicos”.

A finales de septiembre el Ejecutivo aprobó un proyecto de reducción salarial en el sector público que supone conservar cierta parte fija y ampliar la participación de las retribuciones variables en el sueldo, en las que se aplicarían los recortes. El Gobierno afirma que la medida permitirá remunerar a los empleados según su verdadero rendimiento, por lo que será más justa. Los recortes afectarán así mayormente a los empleados estatales que no cumplan debidamente con sus tareas laborales.

No obstante, los sindicatos rechazan este proyecto. Según subrayó Alena Vondrová, presidenta de la Unión Sindical de Órganos y Organizaciones Estatales, el cambio perjudicaría a los empleados, ya que eliminaría la garantía del salario fijo que hasta el presente rige en el sector público.

Alena Vondrová
“Sería un gran cambio en el sistema de remuneraciones que permitiría cambiar la correlación entre la parte fija del salario y las retribuciones adicionales. Esto crearía el peligro de que cada Gobierno que venga podría cambiar según le convenga los topes salariales y el monto de los pagos extra”.

Los sindicalistas temen que de aplicarse este sistema, la reducción salarial podría sobrepasar el diez por ciento previsto por el Gobierno. Afirman que la medida impactará seriamente sobre los presupuestos familiares de muchos ciudadanos, más aún si es aplicada a partir de enero de 2011 cuando se planifica asimismo un aumento del Impuesto al Valor Añadido y un brusco incremento del precio de energías. Los sindicatos del sector público se declararon en estado de alerta de huelga y amenazaron con salir nuevamente a las calles en caso de que se apliquen los cambios en el sistema salarial.

El primer ministro, Petr Nečas, quiere analizar el tema nuevamente con los líderes de la coalición gubernamental y en una reunión del consejo económico ministerial que convocó para dentro de dos semanas. Nečas manifestó que sigue estando dispuesto a negociar también con los sindicatos sobre las formas de cómo aplicar la reducción salarial en el sector estatal.