Cae abruptamente la popularidad del presidente Klaus
La popularidad del presidente de la República, Vacláv Klaus, cae en picada. Su intromisión en asuntos del Gobierno o a la defensa de asuntos polémicos podrían ser algunas de las causas de la pérdida de popularidad del mandatario.
Los números son claros, según la última encuesta, tan solo el 47% de los ciudadanos confía plenamente en el presidente Klaus. Se trata de la mayor pérdida de popularidad desde su llegada al poder, según indicó, Petr Kamberský, experto del diario Lidové Noviny.
“El porcentaje dado a conocer me parece que responde a la metodología que desde hace años utiliza la agencia demoscópica STEM. Esto demuestra que efectivamente se ha registrado una importante caída de la popularidad del presidente, como nunca antes en la historia”, indicó el experto.Durante años el presidente de la República fue el político que gozó de mayor popularidad a nivel nacional. No obstante, los acontecimientos de los últimos meses han puesto a tambalear su prestigio.
Klaus llegó al sillón presidencial en 2003, su popularidad fue entonces del 63%, y se mantuvo así durante años con tan solo pequeñas oscilaciones. La abrupta caída responde a varias circunstancias.
El director de la agencia demoscópica STEM, Jan Hartl, asegura que una posible causa de la pérdida de popularidad fue la participación del presidente en la solución de la reciente crisis gubernamental. Muchas personas consideran que se trató de una especie de intromisión en los asuntos del primer ministro.
El politólogo Zdeněk Zbořil indica que el prestigio de Klaus lo salpicaron las declaraciones del director de prensa de la Oficina Presidencial, Petr Hájek, quien después de conocerse la noticia de la muerte de Bin Laden, dijo que se trataba de una ficción mediática, de un cuento para adultos entre el bien y el mal.
La pérdida de confianza en los políticos es una sensación general que se respira en la sociedad checa. La politóloga Vladimíra Dvořáková considera que el episodio de Chile, cuando las cámaras mostraron como el presidente se guardaba en el bolsillo la pluma protocolar quitó mucho brillo al mandatario.
Aunque para muchos se trató de algo gracioso, el video le dio la vuelta al mundo y manchó la imagen del mandatario; esas cosas que muchas veces no son trascendentales causan grandes impresiones a la población y a los electores en general.