La huelga es un instrumento de los trabajadores para reivindicar sus derechos

Foto: Kristýna Maková

La huelga que hace poco organizaron los sindicatos de transportes, ha causado problemas a una gran parte de los ciudadanos checos. Si no llegaran al trabajo, podían ser desprovistos del sueldo y hasta despedidos. En la presente lección de checo en Radio Praga justamente aprenderán expresiones como huelga, crisis, salarios y otras que tienen que ver con los problemas cotidianos de los ciudadanos.

Foto: Kristýna Maková
Por primera vez me ha pasado que casi llego hoy tarde al trabajo–skoro jsem přišel dnes pozdě do práce-.

¿Por qué motivo?-Z jakého důvodu?– Si bien recuerdo, la huelga–stávka- de los sindicatos de transportes tuvo lugar hace una semana–před týdnem-.

Pues, hubo un accidente y cortaron el tráfico–zastavili dopravu- en la zona donde vivo.

Por suerte fue sólo por poco tiempo-na krátkou dobu-. Peor fue el día de la huelga de transporte-stávka v dopravě-.

Sí, eso no fue nada agradable para muchas personas. Algunas fueron al trabajo–do práce-en bicicleta–na kole-, pero hubo muchas personas que no tenían cómo llegar a su empresa–do svého podniku-.

Foto: Kristýna Maková
Pero si no llegaban, no recibían el salario–plat- por esa jornada o podían ser despedidos–mohli být propuštěni-.

Y todos estos problemas-všechny tyto problémy- surgen por culpa de la crisis económica–ekonomická krize-.

Es cierto y aunque los economistas–ekonomové- afirman que ya nos estamos recuperando de ella, la mayoría de los trabajadores–pracující- no lo han notado hasta el presente. Tienen los mismos salarios–stejný plat- aunque los precios–ceny- de la mayoría de los productos aumentaron–zvýšily se-.

También han aumentado los precios de los servicios–ceny služeb-. Los sindicalistas–odboráři- se oponen a las reformas del Gobierno–vládní reformy- precisamente por temor de que las reformas lleven a una nueva subida de precios–nové zvyšování cen-.

Y la huelga–stávka- los sindicatos la consideran como el instrumento más eficaz para expresar su desacuerdo-svůj nesouhlas-con la política –s politikou- del oficialismo.

Además, la crisis ha incrementado el desempleo–nezaměstnanost- en el país, al igual que ocurrió en otras partes del mundo.

Dlaždiči,  foto: archivo de Radio Praga
Y las personas que tienen trabajo–mají práci- piden mayores salarios–vyšší platy-, pues afirman que lo que cobran no les alcanza para vivir –nestačí jim na živobytí-.

Es muy complicado porque, por otro lado, sin las reformas–bez reforem-la economía nacional no avanzará–ekonomika nepůjde kupředu-. Y los ciudadanos no podrían esperar entonces ninguna mejora de su vida–žádné zlepšení svého života-.

Una mejora anhelan especialmente los jóvenes que, al no conseguir trabajo, no pueden ahorrar–spořit- para conseguir una vivienda–bydlení-, pagar una hipoteca–zaplatit hypotéku- y poder tener familia–založit si rodinu-.

Los jubilados–důchodci- también lo tienen difícil, pero creo que hay que confiar–je třeba věřit- que todo irá mejorando poco a poco.

Efectivamente, y aunque la situación esté difícil, no hay que perder el humor–neměli bychom ztrácet humor-, más cuando los checos tenemos la fama de que el humor es nuestra principal arma para hacer frente a los momentos difíciles de nuestra historia.