Karel Čapek no es solo ciencia ficción
El primer tomo de la ‘Trilogía Noética’ de Karel Čapek ha visto la luz en España por primera vez. Estas obras filosóficas amplían la visión que el público hispanoparlante pueda tener del autor, más famoso dentro de la ciencia ficción y por dar al mundo la palabra ‘robot’. Radio Praga habló con su traductora, Patricia Gonzalo de Jesús.
A la noética, la filosofía del conocimiento, el pensamiento, es a lo que dedica Čapek estas tres novelas, explica su traductora, Patricia Gonzalo de Jesús.
“Karel Čapek se doctoró en filosofía, y concretamente con una tesis sobre filosofía del conocimiento. Esta trilogía lo que pretende en clave de novela es desarrollar su teoría del conocimiento pero a través de la ficción. Son novelas filosóficas en las que más o menos viene a desarrollar que el conocimiento de la verdad absoluta es imposible, que todo depende de puntos de vista y que es muy difícil desprenderse de la subjetividad para llegar a una verdad objetiva”.
El título de esta primera entrega, ‘Hordubal’, es el apellido del protagonista, Juraj Hordubal, un labrador del este de Eslovaquia emigrado a Estados Unidos donde trabaja en una mina. Al ser analfabeto, no escribe a su familia durante los casi siete años que pasa en el extranjero. Para cuando vuelve Hordubal, su mujer ya ha rehecho su vida al pensar que el marido ha muerto. El triángulo amoroso, sentimental y trágico, resultante es la trama de la obra.Para la traducción, el principal reto ha sido la forma de expresarse del protagonista, llena de expresiones dialectales de la zona rural del este eslovaco de donde proviene. Además Hordubal vuelve de Estados Unidos usando el inglés también a su manera. Patricia Gonzalo de Jesús, que también es traductora de lenguas rusa y eslovaca, explica cómo ha solucionado estas dos cuestiones.
“Por lo que he optado es por darle un tono rural más que dialectal. Palabras un poco menos usadas, no dialectales, que tuvieran un cierto tono rústico. Aquí he funcionado por la táctica bastante poco científica de pensar en cómo lo diría mi abuelo. Hay cosas que sin ser dialectales sí que son poco utilizadas y teñían el texto de cierto sabor del terruño. Luego las palabras en inglés las he dejado tal cual, dado que el autor las dejó así en el original en checo. Lo que hemos hecho es añadir al final un glosario”. En todo caso, dice Patricia Gonzalo de Jesús, ‘Hordubal’ ha sido menos complicada de traducir que ‘La Krakatita’, la novela de Čapek publicada también por vez primera en España el año pasado. La novela, de ciencia ficción como los grandes clásicos del autor ‘R.U.R.’ o ‘La Guerra de las Salamandras’, estaba llena de términos químicos o científicos, a menudo inventados por el propio Čapek.En ‘La Krakatita’, un libro que se ha vendido muy bien en España, el checo prevé un debate que pocos años después estaría en boca de todos con el descubrimiento de la bomba atómica, dice la traductora.
“La Krakatita trata sobre un científico que descubre un explosivo. Čapek viene a adelantar teorías sobre la bomba atómica o la energía atómica. Viene a avisar sobre el peligro de los avances científicos siempre que no se usen con una finalidad moral, para un beneficio para la humanidad, sino con fines destructivos. También desarrolla teorías del átomo. Es una novela que siendo ciencia ficción está muy bien documentada”.La década de los 80 y principios de los 90 fue el periodo del boom de la literatura checa en España. Fue cuando más obras y autores de esta procedencia vieron allí la luz. El problema, según Patricia Gonzalo de Jesús, es que la repercusión que alcanzaron grandes figuras como Bohumil Hrabal o Milan Kundera, taponaron el camino a otros escritores valiosos. O por ejemplo que se redujo a otros escritores como Čapek a autor de ciencia ficción, como hemos visto.
Después ha habido casi dos décadas en blanco, en las que se fue ese interés por la literatura checa, pero en los últimos dos o tres años, la tendencia se ha revertido, dice la traductora.
“Últimamente hay de repente un interés de los editores madrileños y barceloneses por la literatura checa, y es en parte por las actividades del Centro Checo y la ayuda con subvenciones del Ministerio de Cultura checo. Como las cosas están como están, el hecho de que les ayuden a elegir autores, o el hecho de que siempre vayan a tener un apoyo tanto para las presentaciones como para pagar la traducción, pues ayuda mucho”.
De hecho, tras completar la publicación de la ‘Trilogía Noética’ de Karel Čapek, la editorial El Olivo Azul tiene ya previsto también editar otras obras de autores checos contemporáneos.