Angela Merkel hablará en Praga del pacto de austeridad presupuestaria
Las relaciones checo-alemanas y el viaje a Praga de la canciller Angela Merkel; el precio de los combustibles sigue subiendo y la Policía dispone de nuevos vehículos para interceptar a los ‘piratas’ de las carreteras. Estos son algunos de los temas abordados por los diarios checos.
Merkel llega a Praga para hablar con sus vecinos de dos temas claves: el pacto de austeridad presupuestaria y la política energética.
Este momento se trata de dos asuntos un tanto espinosos para los checos, porque Chequia y Gran Bretaña son los únicos países comunitarios que se negaron a firmar el pacto fiscal y mientras Alemania promueve poner fin a la política nuclear, los checos insisten en continuar la ampliación de la central de Temelín.
En declaraciones a los medios de comunicación la canciller alemana adelantó que no pretendía convencer de Nečas para que firmara el pacto, pero que hablaría con él sobre el tema.
Prácticamente cada día aparece una nueva información sobre la influencia de Janoušek en el acontecer político y comercial de Praga. Nuevas escuchas, reveladas esta vez por el rotativo Insider, citado por Lidové Noviny, indican que el ‘lobbista’ era muy conocido en varios ministerios.
El caso del empresario Roman Janoušek ha empezado a salpicar a un gran número de políticos golpeando directamente al Partido Cívico Democrático, la mayor agrupación de la coalición gubernamental.
La Bolsa de Rotterdam que influye el precio de los carburantes en Chequia ha registrado fuertes altibajos que llevan a los expertos nacionales a pensar en un nuevo aumento.
Los dueños de las estaciones de gasolina tratan de no subir los precios demasiado, porque temen una significativa pérdida de clientes. El aumento del precio de los combustibles se refleja en la mayoría de los productos que se transportan por carretera, indican los expertos.
No se trata de bandas de asaltantes, en Chequia se llama así a los conductores temerarios que gracias a sus vehículos de grandes cilindradas huyen a la Policía a gran velocidad.
La Policía de Tránsito tiene ahora una flotilla de automóviles capaces de desarrollar hasta 250 kilómetros por hora que circularán por las autopistas y autovías del país donde se registra un mayor número de accidentes por irrespeto de la velocidad máxima establecida.
Los nuevos bólidos de la Policía no disponen de ningún tipo de identificación exterior, pero de acuerdo con el diario ya circulan en Internet fotografías de los vehículos, con su número de matricula.
El jefe de la Policía de Tránsito, Leoš Tržil, dijo que eso no le molestaba, porque más que represión, lo que buscan es prevención.
