Una carrera de 3.000 km en pro del agua potable en África
Unos tres mil kilómetros es la distancia del recorrido desde Praga hasta África atravesando Alemania, Francia y España. Un profesor checo recorrerá esta ruta, en bici y a pie, para financiar la construcción de pozos en África.
Su propósito es llamar la atención sobre uno de los principales problemas del continente africano: el difícil acceso de su población al agua potable, como declaró.
“Me gustaría sacar a la luz el problema con el agua potable. Unas 6.000 personas mueren cada día por problemas con la insalubridad del agua, es decir, dos millones al año. Es algo de lo que no se sabe mucho. Por eso quiero comunicarlo, sobre todo a los niños, con este viaje de Praga a Marruecos”.
El evento, organizado por la Escuela Alemana de Praga, enlaza con la carrera Praga-Londres que tuvo lugar el año pasado y cuyos ingresos permitieron pagar la construcción de un pozo en Uganda que actualmente abastece a unos 700 niños. Los interesados podrán contribuir con sus donaciones a la cuenta de la fundación Prague to Africa, creada para el proyecto. La recaudación irá dedicada íntegramente a la excavación de nuevos pozos en África.El viaje de David Chrištof durará 65 días y en él alternará la carrera a pie con la bicicleta, como explica.
“En Domažlice me montaré en la bicicleta, y de ahí a Múnich y Augsburgo, y de ahí de nuevo correré a pie. Lo alternaré cada cinco días. No usaré ningún otro vehículo. Solo llevo tres pares de zapatillas, y espero usar solo dos: uno para la bici y el otro para correr”.Chrištof, que corre activamente desde los 18 años, se topó con la posibilidad de contribuir con esta actividad a una buena causa en Estados Unidos, cuando conoció por casualidad la organización Blue Planet Run, con la que atravesó 16 países. Ahora, sin embargo, corre ya por su propia cuenta, apoyado eso sí, por el centro educativo donde trabaja y por sus colegas y alumnos. El corredor tiene tras de sí 20 maratones y 13 ultramaratones, incluidas dos carreras de 160 km.
Se calcula que en la actualidad unos 300 millones de personas tienen problemas para acceder al agua potable en el continente africano, una situación que se debe más a la carencia de recursos para construir infraestructuras que a las sequías. En el mundo muere más gente debido al agua insalubre que a las guerras, el SIDA o la malaria.
Fotos: Till Janzer