Persiste el malestar por la masiva amnistía presidencial de Václav Klaus
La polémica amnistía declarada por el presidente Václav Klaus al final de su mandato sigue levantando ronchas en la sociedad. La medida de gracia puso en libertad a más 6000 presos y representó un obstáculo para determinados procesos abiertos en casos de corrupción o delitos fiscales. Además, sigue siendo un misterio quién es el autor del texto.
La medida de gracia favoreció al principio a 6.500 presos, pero al final se beneficiaron unas 50.000 personas que vieron terminados los procesos en su contra y muchos no tuvieron que pagar multas. Lo más criticado fue, sin embargo, la anulación de unos 3.000 casos de delitos financieros graves.
En vista del malestar causado por la amnistía entre la población, el nuevo presidente checo, Miloš Zeman, se comprometió a publicar el nombre del autor del texto de la medida de gracia, ya que Klaus se negó a dar detalles al respecto.
El jefe de la Oficina Presidencial, Vratislav Mynář, dijo a la Televisión Checa que entre los autores del texto de la medida de gracia se encuentran un antiguo asesor y dos de los hombres más cercanos al ex presidente Klaus.“No soy ningún Sherlock Holmes, simplemente utilicé las posibilidades que ofrece el cargo de Jefe de la Oficina Presidencial y algún que otro método propio”, indicó Mynář.
De acuerdo con Mynář los responsables del texto de la polémica amnistía presidencial son el antiguo encargado de asuntos políticos de la Presidencia Ladislav Jakl, el ex subjefe de la Oficina Presidencial y el jurista Pavel Hasenkopf.
Mientras que los dos primeros niegan todo protagonismo en el asunto, Hasenkopf asegura que la amnistía fue obra del Ministerio de Justicia y que él mismo escribió una versión inicial que desvirtuaron los funcionarios ministeriales.
El abogado dio a entender que con la modificación del texto el Ministerio de Justicia buscó limpiar las cárceles saturadas de presos y poner fin a interminables procesos que estancan el trabajo en las diferentes instituciones del sistema judicial.El ministro de Justicia, Pavel Blažek, calificó de absurdas las declaraciones de Hasenkopf y estudia la posibilidad de presentar una demanda en su contra.
Mientras tanto, el antiguo presidente Václav Klaus y sus empleados más cercanos se negaron a responder a una solicitud de la oposición política que exigió que se hiciera público el nombre del autor del texto de la polémica amnistía, por lo que el tema sigue provocando malestar entre la población.