El Gobierno checo reducirá las ventajas fiscales de los autónomos

Foto: Tomáš Adamec, Archivo de ČRo

El Gobierno checo planea poner un techo al uso de la cuota fija de gastos de los trabajadores autónomos, actualmente en el 60%. La medida actuará conjuntamente al registro obligatorio de ingresos y la ausencia de reducciones en el pago a los seguros médico y social, lo que ha llevado al partido opositor TOP 09 a denunciar lo que ha llamado "un cóctel mortal" para los cuentapropistas.

Foto: Tomáš Adamec
En la República Checa los trabajadores autónomos disfrutan de la ventaja de contar con una cuota fija de gastos a la hora de pagar impuestos. Sin necesidad de demostrar nada, sin presentar facturas ni documentación alguna, pueden declarar como gastos un 60% de los beneficios. Esto les ahorra tiempo y recursos, y es da la posibilidad de pagar menos impuestos si sus gastos fueron en realidad menores.

El nuevo Gobierno se ha propuesto sin embargo aumentar la recaudación de impuestos, y en parte lo piensa lograr presionando un poco más a los cuentapropistas. De acuerdo con el plan del ministro de Finanzas, Andrej Babiš, del movimiento ANO, a partir del año que viene los cuentapropistas podrán disfrutar de la mencionada cuota fija solo si sus ingresos son inferiores a los dos millones de coronas, unos 73.000 euros.

Desde la oposición, Miroslav Kalousek, del partido TOP 09, ha denunciado lo que considera una presión injusta para este tipo de trabajadores, y más teniendo en cuenta que próximamente el Ejecutivo pondrá en marcha el registro electrónico obligatorio de ingresos, lo que supondrá mayor tiempo en tareas administrativas y mayor control para los autónomos. Además, todavía no llega la prevista rebaja en las cuotas a la Seguridad Social y el Seguro Médico. "No se trata de una subida fatal de impuestos, pero para algunos profesionales puede ser motivo de liquidación", advirtió Kalousek.

Desde el partido ANO defienden la medida asegurando que no se trata únicamente de una forma de aumentar los ingresos del Estado, que se espera crezcan en 36 millones de euros, sino también de imponer una cuota fija más acorde con la realidad y devolver a este sistema su sentido original: proteger a los pequeños autónomos.

En la República Checa hay medio millón de autónomos, y 300.000 de ellos se acogen a esta cuota fija de gastos. El resto demuestra tener gastos superiores al 60%.