A las mujeres checas les atrae montar su propia empresa
Un número cada vez mayor de mujeres checas decide emprender. La mayoría de las mujeres que montan una nueva empresa tiene entre 25 y 35 años de edad, acaba de terminar los estudios o quiere reincorporarse al proceso laboral después de sus vacaciones de maternidad. Las madres con niños pequeños suelen fundar una empresa precisamente por no encontrar trabajo a media jornada.
El año pasado, por ejemplo, más de 10.000 mujeres en Chequia iniciaron actividades empresariales, y este número superó diez veces el de los nuevos emprendedores masculinos, según datos del Ministerio de Industria y Comercio. Este fenómeno fue una gran sorpresa para todos, destacó Eva Svobodová, directora general de la Asociación de la Pequeña y Mediana Empresa.
”También a nosotros nos sorprendieron esos datos estadísticos. Parece que los negocios en el siglo XXI los encabezarán las mujeres. Naturalmente, ello se debe en especial a la situación en el mercado laboral, cuando las mujeres que terminan sus estudios y las que regresan de la baja de maternidad tienen problemas para encontrar trabajo en una empresa pública o privada, por lo que deciden montar una empresa”.
La mayor parte de las mujeres que comienzan proyectos empresariales tienen entre 25 y 35 años de edad, acaban de terminar los estudios o terminan sus vacaciones de maternidad. Aumenta igualmente el número de mujeres entre los 45 y los 55 años que deciden montar una pequeña o mediana empresa para independizarse. Las mujeres montan negocios mayormente en el sector de los servicios como cosmética y peluquería, contabilidad, crean tiendas en Internet, así como pequeñas cafeterías.Sin embargo, en cargos de dirección en empresas que se dedican a las nuevas tecnologías hay también cada vez más mujeres, recalcó en una reciente conferencia empresarial Karel Havlíček, presidente de la Asociación de la Pequeña y Mediana Empresa.
”Registramos un sorprendente incremento del número de mujeres que se desempeñan como gerentes en compañías dedicadas a las nuevas tecnologías. Por ejemplo, un gran porcentaje de gerentes de compañías de nanotecnologías son mujeres. Algo semejante hay en el sector de las biotecnologías y la biomedicina”.
En el caso de las mujeres con hijos pequeños juega un importante papel en su decisión el hecho de que en Chequia hay pocas posibilidades de trabajar a media jornada. Por este motivo se queda en casa una de cada tres mujeres con niños en edad preescolar. Resulta que la mayoría de las compañías teme emplear a media jornada porque consideran que el empleado hará menos trabajo. Karel Havlíček rechaza rotundamente esa opinión.
“El trabajo a media jornada resulta mucho más efectivo frecuentemente. El rendimiento de la mayoría de las personas que trabajan durante el 50% del tiempo de la jornada laboral normal no es del 50%, sino que responde al 70% y hasta el 80% del rendimiento medio. Y es que esas personas se concentran al máximo durante esa media jornada y así rinden más”.
Al tomar la decisión de dedicarse a la empresa, en el caso de las mujeres es muy importante la postura que adoptan al respecto sus familias. Si la mujer tiene el respaldo de su esposo, sus padres o hermanos y éstos le ayudan en el cuidado de los hijos, tiene mayor libertad para decidirse y se siente más segura. El apoyo de la familia es una de las premisas fundamentales para que la mujer pueda emprender con éxito, coinciden los especialistas.