Aprobada la estrategia de lucha contra la exclusión social
Reducir al mínimo el número de las localidades socialmente marginadas en Chequia es el objetivo de la estrategia de lucha contra la exclusión social hasta el año 2020, aprobada por el Gobierno checo este miércoles. El proyecto pretende ayudar a los habitantes de los guetos a solucionar sus problemas y a cambiar radicalmente sus vidas.
La nueva estrategia cuenta por ejemplo con ofrecer en los próximos cuatro años nuevas viviendas en forma de apartamentos a unas 6.000 familias que actualmente viven en albergues públicos. Simultáneamente se trabajará con esas personas, para que sean capaces en un futuro próximo de seguir funcionando sin ayuda, y de resolver solas los eventuales problemas que puedan aparecer. También se aplicarán por ejemplo programas para crear nuevos puestos de trabajo, según dijo a la Televisión Checa el ministro para los Derechos Humanos, Jiří Dienstbier.
”La estrategia debe ser compleja. Debemos tener en cuenta todas las dificultades existentes en este sector, y proceder a la solución de cada una por separado comenzando con la vivienda. Sólo así será posible eliminar la exclusión social”.El documento, que ahora será detallado, analiza asimismo el tema de la seguridad de los habitantes de los guetos, las condiciones de vida en los albergues sociales, y de la enseñanza de los menores en los barrios marginados. Establece por ejemplo la necesidad de adoptar medidas para que en 2020 ningún niño tenga que vivir más de un mes en una vivienda inadecuada, como sostiene Martin Navrátil, de la Agencia Estatal para la Inclusión Social.
”Surgirá un sistema en el que podrán inscribirse las personas que necesiten ayuda urgente, por ejemplo, en la búsqueda de vivienda o trabajo. Queremos que este sistema tenga una capacidad competitiva y que ayude a combatir el nefasto negocio con la pobreza, aplicado en especial en los albergues privados”.
La estrategia cuenta asimismo con ayudar a los habitantes de los guetos a encontrar trabajo, a buscar eventualmente cursos de recualificación, y a inculcarles ciertas costumbres laborales. Asimismo se les ayudará a resolver cómo sufragar sus eventuales deudas, que son una de las causas más frecuentes por las que algunas personas caen en serios problemas, recalcó el ministro para los Derechos Humanos, Jiří Dienstbier.
”Por ejemplo, hay que modificar el sistema de ayudas sociales, para estimular a los habitantes de los barrios de exclusión a que trabajen, aunque sea por el salario mínimo, y paguen sus deudas. Es indispensable inculcarles a los ciudadanos que trabajar es mucho más ventajoso que recibir ayudas sociales”.Dienstbier insistió en la importancia de que en la aplicación de la estrategia de lucha contra la exclusión social participen activamente tanto los órganos oficiales competentes, como las alcaldías y organizaciones cívicas, pero especialmente, los propios afectados por la exclusión social. Según el ministro, sin el interés y una activa colaboración de los habitantes de los barrios marginados, ninguna estrategia, por mejor que fuera, podrá ser llevada con éxito a la práctica.