La Bella Durmiente, un hombre sonriente y otros entes

Šípková Růženka, foto: Project Gutenberg

Durmiente, crujiente, ardiente o hirviente. Al igual que el español el checo también tiene participio presente, aunque se usa bastante más y presenta algunas complicaciones extra.

Šípková Růženka,  foto: Project Gutenberg
Roman, tengo una duda de gramática. Muchas veces me encuentro con verbos en checo que tienen el sufijo –ící o -jící, y se utilizan como adjetivos. ¿Qué significan exactamente?

Es lo que en español se conoce como participio presente, es decir, las palabras que terminan en –ante y –iente, aunque en checo se usa más que en español. Por ejemplo, el cuento de la Bella Durmiente sería literalmente en checo -Spící princezna-, aunque la verdad es que tiene otro nombre totalmente diferente, Šípková Růženka. El caso es que a la raíz del verbo dormir–spát- se le añade el sufijo –ící o –jící y ya lo tienes.

No parece difícil. Hablando de viejas historias, el llamado arbusto ardiente que aparece en la Biblia sería –hořící keř-, ya que el verbo arder es –hořet-.

Efectivamente.

Entonces, ¿cómo podría decir, por ejemplo, un hombre sonriente? ¿-usmívající muž-?

El verbo sonreír es en checo -usmívat se-, es reflexivo. Así que sería –usmívající se muž-. Fíjate que en checo, a diferencia del español, el participio presente tiene que ir con el pronombre reflexivo si el verbo del que deriva es reflexivo.

Učící se kluk,  foto: Gonzalo Silva / freeimages
Ajá, así que –učící se kluk- sería un chico aprendiente o estudiante. Espera, eso no tiene mucho sentido. Yo diría un chico que aprende o estudia, o un chico estudiando.

Claro, es que en checo, como decía, el participio presente se usa más, y prácticamente lo podemos usar con cualquier verbo, e improvisar participios presentes cuando los necesitamos. En español esto ya no es así, y los participios presentes que hay son los que hay, no podemos inventar nuevos.

Y si se puede utilizar casi siempre, ¿entonces cómo traducirías un perro que ladra? ¿-Štěkající pes-?

Sí, sería una buena traducción. Pero también se puede traducir literalmente: -pes, který štěká-. Más o menos es lo mismo, aunque con el participio presente queda más formal, más elegante.

Entiendo. Y si en español usamos participio presente, ¿en checo también?

Casi siempre, aunque hay excepciones. Pan crujiente podría ser -křupající chleba-, pero lo normal es decir -křupavý chleba-.

Uf, ¿y hay alguna complicación más?

Dívající se kočka,  foto: Štěpánka Budková
Sí, pero es algo lógico. Para crear el participio presente usamos solo la raíz de verbos imperfectivos, que se pueden conjugar en presente, y no de los perfectivos, que hablan de acciones terminadas. Podemos decir –dívající se kočka-, un gato que mira, pero no –podívající se kočka-, que sería absurdo.

Creo que ya está claro. Venga, ponme a prueba. Dime ejemplos en checo y los traduzco.

Pues mira, hay una expresión que me encanta, -do nebe volající-. ¿Cómo dirías –do nebe volající zmatek-?

Un desastre que clama al cielo. Literalmente, al cielo clamante.

No está nada mal. -Vařící voda-.

Žena pijící pivo,  foto: Archivo de Kristýna Maková
Esa es fácil. Agua hirviente. Aquí sí funciona la traducción literal.

Veo que se te da bien la gramática. A ver esta: -Žena pijící pivo-.

Una mujer que bebe cerveza.

Y para terminar. -Končící pořad-.

Un programa que termina.

Como el nuestro. Hasta la semana que viene