En vez de piloto se puede llegar a ser un excelente violinista
Su camino a la cúspide musical la inició a finales de los años sesenta, cuando en noviembre de 1967 se presentó como solista en violín en Londres, con la Royal Philharmonic Orchestra. La actuación del violinista checo, Václav Hudeček, la escuchó entonces el renombrado músico ruso, David Oistrach, quien le predestinó a su joven colega un gran futuro, y le ofreció ser su profesor. Este mes Václav Hudeček cumple 65 años de edad, y los éxitos en su carrera profesional demuestran que Oistrach no se equivocó.
Václav Hudeček, uno de los mejores violinistas checos
Václav Hudeček es uno de los mejores solistas en violín checos de la actualidad que se dedican a la interpretación de la música clásica y a su popularización. Es oriundo de la pintoresca ciudad de Rožmitál pod Tremšínem, situada a unos 80 kilómetros al suroeste de Praga.A pesar de que su padre, quien fue veterinario de profesión, deseaba que su hijo estudiara un día para piloto o médico, desde temprana edad le enseñó las bases de la música que dominaba por ser violinista aficionado. En Navidad de 1957, los padres le regalaron a Václav, entonces de cinco años de edad, su primer violín. Más tarde estudió violín en una escuela de música y a sus 14 años ya era considerado un músico talentoso con amplias perspectivas.
Los primeros éxitos profesionales de Hudeček
Hudeček participó con éxito en varios concursos musicales y a su temprana edad tuvo la oportunidad de tocar en público en la torre Daliborka, en el área del Castillo de Praga.
La Radiodifusión Checa grabó en esa ocasión con Hudeček una entrevista que se guarda en los archivos, y en la que éste dijo que todos los días ensayaba tres horas en violín como mínimo y habló de los premios que había ganado.
”Gané ya varios concursos de música y recibí diversos premios como libros, floreros y, sobre todo diplomas”.
Dos años más tarde, en 1968 el joven músico se presentó en el Festival Internacional de Música ‘Primavera de Praga’, a raíz de haber ganado anteriormente en 1966 y 67 el concurso para jóvenes talentos musicales ‘Concertino Praga’, adjunto al festival. Su actuación fue recibida con fuertes aplausos del público presente.
Ante el violinista se abren las puertas al mundo
Con anterioridad, en 1967 Hudeček fue invitado a actuar en Londres con la Royal Philharmonic Orchestra, lo que le abrió el camino al mundo. Gracias a esa actuación, Hudeček conoció al mundialmente célebre violinista ruso, David Oistrach, quien más tarde, entre 1970 y 1974 fue su profesor. Gracias a él, Hudeček aprendió mucho y adquirió nuevas experiencias y costumbres a la hora de tocar, que posteriormente desarrolló en la Academia de Bellas Artes, en Praga, bajo la dirección del violinista y profesor de música checo, Václav Snítil.A partir de la actuación en Londres, Hudeček comenzó a ser invitado para dar conciertos a un sinnúmero de lugares, desde América hasta Australia y Japón, y actuó con muchas orquestas de renombre del mundo como la Orquesta Filarmónica de Berlín, la Orquesta Sinfónica NHK de Tokio, y la Orquesta de Cleveland.
A sus 17 años de edad, Václav Hudeček grabó su primer álbum con grabaciones del Concierto para Violín y Orquesta de Niccolo Paganini y una de las sonatas de Georg Friedrich Händel.
El éxito no protege al músico del nerviosismo antes de cada concierto
Independientemente del éxito, en una entrevista concedida a comienzos de este año a la Radiodifusión Checa, Hudeček reconoció que hasta hoy se pone muy nervioso antes de cada concierto.
”Claro, a mi edad ya no puedo decir que me da miedo, pero siento una gran responsabilidad. Actúo en público desde hace más de 50 años y cuando uno toca tanto tiempo, y tantos años el público viene a escucharme, es un gran compromiso. Porque hoy día el público lo componen ya tres generaciones, dos de ellas que son nuevas. Creo que es natural que me ponga nervioso porque la gente envejece y lo que gustó ayer puede no gustar hoy. Más cuando a mis conciertos vienen otras personas que hace 50 años”.
El violinista transmite su experiencia a la joven generación
Hudeček dedica gran parte de su tiempo a la joven generación de músicos. Cada año organiza cursos veraniegos de violín en el balneario de Luhačovice, al este de la República Checa, y un festival internacional de música en Moravské Budějovice, localidad al suroeste de la ciudad de Brno.En 2007 Hudeček fue premiado con la Medalla al Mérito checa por su aporte a la cultura y el arte, y en 2015, como el único checo en la historia, fue distinguido por el presidente italiano con el prestigioso grado de Caballero de la Orden de la Estrella de Italia.
Otro significativo éxito de Václav Hudeček es el disco de oro y de platino que a finales de los años 90 obtuvo por su grabación de las Cuatro Estaciones, de Antonio Vivaldi. Realizada en 1992 con la orquesta Virtuosi di Praga bajo la batuta de Pavel Kogan, sigue siendo una de las producciones musicales más exitosas hechas en la República Checa.