El Gobierno y el Banco Central Checo se unen para frenar la fortaleza de la corona
La fortaleza adquirida por la moneda checa continúa amenazando el desarrollo de la economía del país. El Banco Central Checo y el Gobierno decidieron unir sus esfuerzos para luchar contra el fortalecimiento de la moneda nacional.
El Primer Ministro checo, Vladimír Spidla, considera el fortalecimiento de la corona como un verdadero riesgo que hay que impedir con pasos decisivos. Por este motivo, resolvió prolongar el acuerdo con el Banco Central Checo sobre el cambio de los ingresos de divisas del Gobierno, firmado por su antecesor Milos Zeman a principios de este año.
Así, por ejemplo, el Gobierno intentará adquirir en coronas el crédito que solicitó ante el Banco Europeo de Inversiones para paliar los daños causados por las inundaciones.
"Suponemos que se tratará de una suma de varios millones de coronas, pero que en todo caso no debería superar los 10 mil millones. Todo dependerá de los proyectos que preparará cada uno de los ministerios", indicó el ministro de Finanzas checo, Bohuslav Sobotka.El aumento de la afluencia de divisas a la República Checa contribuiría innecesariamente al fortalecimiento ulterior de la corona. La economía del país no es capaz de llevar este rápido ritmo, advirtió el Gobernador del Banco Central Checo, Zdenek Tuma.
La moneda checa se fortaleció en la primera mitad del año en un 15 por ciento. El peor impacto lo sufrieron los exportadores que experimentaron un abrupto descenso de ganancias. Según el acuerdo con el Gobierno, el Banco Central Checo seguirá dirigiendo los ingresos de divisas del Estado a sus reservas. Por otra parte, el Gobierno no venderá bonos soberanos en el extranjero.