Socialdemocracia checa: El temor de la UE ante una afluencia masiva de mano de obra barata carece de fundamento
Durante su reunión del martes con el Canciller alemán, Gerhard Schröder, el líder del gubernamental Partido Socialdemócrata checo, Vladimír Spidla, trató de disipar las preocupaciones de Alemania ante una afluencia masiva de mano de obra tras la adhesión de la República Checa a la Unión Europea.
Fue precisamente el temor de Alemania a un significativo aumento del desempleo provocado en su país por la llegada masiva de trabajadores de los países centroeuropeos tras su entrada en la Unión Europea lo que la llevó a solicitar a finales del año pasado un período de siete años durante el cual los nuevos miembros no tendrían libre acceso al mercado de trabajo comunitario.
Tras su entrevista con el Canciller alemán, efectuada en Berlín en el marco del Congreso de partidos socialdemócratas europeos, el líder de la Socialdemocracia checa, Vladimír Spidla, dijo al respecto:
"He dejado bien claro durante la reunión con Gerhard Schröder que la propuesta alemana de restringir por un período de siete años el libre acceso al mercado de trabajo carece de fundamento, lo que la República Checa puede ilustrar con datos fidedignos".
Según datos publicados por el Instituto Estatal de Trabajo y Asuntos Sociales checo, unos 175 mil ciudadanos checos tendrían interés por trabajar en otros países comunitarios. Y un estudio, elaborado a petición de la Comisión Europea, revela que en la primera ronda de la ampliación acudirían a los países comunitarios de Europa Occidental, en busca de empleo, unos 200 mil ciudadanos de nuevos países miembros.
Tomando en consideración el envejecimiento de la población europea, el oficialismo comunitario coincide en que la Unión acusaría próximamente una insuficiencia de mano de obra. El presidente de la Comisión Europea, Romano Prodi, sostiene, por ejemplo, que dentro de dos años faltarán en la Unión un millón 700 mil expertos en telecomunicaciones y tecnologías informáticas.