República Checa obtiene de Bruselas importantes concesiones en política fiscal
Tras concluir ayer miércoles en Bruselas el capítulo "política fiscal", la República Checa comparte ahora con Hungría el segundo lugar en lo que se refiere a los avances en las negociaciones de admisión a la Unión Europea, después de Chipre que lidera entre los países candidatos.
Según explicara el ministro checo de Relaciones Exteriores, Jan Kavan, las más difíciles en Bruselas han sido las negociaciones relativas a los impuestos sobre los cigarrillos. Los negociadores de la Unión Europa acabaron por aceptar que la República Checa aplicara a los productos tabacaleros las tasas habituales en los países comunitarios tan sólo tres años depués de adherirse a la Unión. Si la República Checa no hubiera logrado este período de transición de tres años, después de su ingreso en la Unión los precios de los cigarrillos habrían subido un 100 por 100, lo que habría impulsado la espiral de la inflación y afectado a las capas sociales de bajos ingresos en las que hay más fumadores.
Los negociadores checos han obtenido una excepción permanente también para el impuesto directo a ser aplicado al típico licor de ciruelas- slivovice-, producido por pequeñas destilerías familiares de Moravia. Antes de que se iniciaran las negociaciones sobre el capítulo "impuestos", corrían rumores de que las directrices fiscales de la Unión Europea acabarían con slivovice, cuyos precios dejarían de ser competitivos si en este licor se aplicasen impuestos acordes con la política fiscal comunitaria.Los negociadores checos lograron en Bruselas que en vez de 6 dólares por litro, slivovice será gravado con algo menos de 3 dólares.
La República Checa logró también que hasta 2007 no se aplicara el IVA comunitario sobre el suministro de calor a los hogares. Si no se hubiera obtenido este período de transición, tras el ingreso en la Unión Europea, un 40 por ciento de los hogares checos serían afectados por el encarecimiento de la calefacción.
Y quienes encargan obras de reforma en sus hogares, hasta 2007 pagarán un IVA inferior al practicado en la Unión Europea. Para la República Checa son muy importantes las concesiones obtenidas en Bruselas en tema de política fiscal. Los bolsillos de los ciudadanos checos no sufrirán tanto shock al adherirse a la Unión.