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Miles de miembros de la organización deportiva Sokol se dan cita esta semana en Praga en el marco de su 17 Encuentro General. Entre los gimnastas, llegaron a la capital checa 1500 deportistas del extranjero.
Unos 15.000 miembros de la organización deportiva checa Sokol pasearon en un desfile el pasado domingo por el centro de la ciudad de Praga, inaugurando así el 17 Encuentro General de la institución. Este culminará con los actos del jueves y el viernes en el Fortuna Arena, donde se presentarán hasta 20.000 gimnastas haciendo coreografías colectivas.
Además de los sokol checos, llegaron a la capital checa 1500 miembros del extranjero, por ejemplo, de Eslovenia, EE.UU., Francia, Australia o Ucrania.
Petra Trnková es la vicealcaldesa del Sokol de París que con sus cien miembros es una de las organizaciones checas más fuertes en Francia, como contó a Radio Praga Internacional.
“Yo me uní al Sokol porque en París tiene un espacio hermoso donde, por ejemplo, se efectuó el primer encuentro de Sokol fuera de Checoslovaquia. Cuando los comunistas prohibieron el Sokol, losmiembros en el extranjero se separaron y emprendieron su propio camino. El primer encuentro se llevó a cabo en 1951 en París”.
La organización Sokol surgió hace más de 160 años y siempre ha influido en la vida social y hasta política de los checos. La tarea de los miembros era desarrollar una habilidad física, pero también organizar actividades culturales, apoyar el desarrollo de las personas y motivarlas a tomar decisiones éticas tanto en la vida personal como la social. Asimismo, promovía la tolerancia nacional, racial, religiosa, la democracia, la libertad y el humanismo.
Por eso, los miembros del Sokol tuvieron conflictos con los regímenes totalitarios que sacudieron Checoslovaquia. Sokol no pudo funcionar durante las dos Guerras Mundiales ni tampoco después de que el régimen comunista tomara el poder en 1948, suspendiendo todas las actividades de Sokol finalmente en 1952. No fue posible retomar sus actividades hasta la restauración de la democracia en 1989.
Aunque el Sokol fue perseguido durante la mayor parte del siglo XX, pudo renacer gracias al hecho de que la afiliación a dicho grupo se hereda de generación en generación dentro de las familias, independientemente de las fronteras, como contó a Radio Praga Internacional Lenka Bagherian del Sokol de San Francisco, en EE.UU.
“Yo empecé a ser activa en Sokol en San Francisco, pero mi mamá fue miembro del Sokol e incluso en los años 40 participó en un Encuentro General. Entonces, me dije que también intentaría participar en este encuentro al menos una vez en mi vida, recordando así a mi mamá”.
De acuerdo con los organizadores del encuentro, las representaciones de este jueves y viernes contarán con hasta 50.000 espectadores. También será posible seguirlas en las emisiones de la Televisión Checa. Como reveló Lenka Bagherian, a ella y a sus compañeras se les reconocerá por los paraguas de color naranja y violeta. El grupo francés de Petra Trnková, por su parte, vestirán de blanco, rojo y azul, los colores nacionales de tanto checos como franceses.
