Menos inversión en transporte público tras la crisis del coronavirus
Las limitaciones que se impusieron durante la pandemia de coronavirus han afectado al sector del transporte público, que no espera grandes inversiones a corto plazo.
Muchos ayuntamientos de la República Checa van a destinar menos dinero de lo previsto para el transporte público este 2020. La razón principal, además del impacto económico de la crisis, es la baja afluencia de viajeros durante los peores momentos de la pandemia de coronavirus, que ha conllevado una menor venta de billetes.
Según Martin Chval, director ejecutivo de la Asociación de Transportes, los transportes públicos de ciudades y pueblos checos han tenido unas pérdidas por valor de unos 37 millones de euros a causa del coronavirus. De acuerdo con Chval, esto significará una menor inversión de los ayuntamientos en reparación de vías y compra de vehículos nuevos, por ejemplo.
No obstante, no todas las ciudades están respondiendo igual frente a este problema. Aunque hay lugares como Ostrava donde el Ayuntamiento pagará un 7 % menos a la empresa municipal de transportes, ciudades como Jihlava han decido mantener el presupuesto intacto.
El caso de Praga es especialmente problemático por la construcción de la línea de metro D, un proyecto de gran envergadura. Según el concejal de Transportes, Adam Scheinherr, aunque Praga reduzca la partida destinada a transporte, la construcción de las nuevas estaciones de metro no debería verse afectada.
Según los representantes municipales, este problema afectará principalmente a los proyectos futuros y a la modernización de vehículos e infraestructura, pero en general, la mayoría considera que no tendrá impacto en el funcionamiento regular y en el cumplimiento de sus trayectos actuales.