Más impuestos al tabaco, pero menos recaudación
Los ingresos por impuestos especiales al tabaco durante el pasado año fueron bastante inferiores a las previsiones del Gobierno checo.
El aumento de los impuestos especiales sobre el tabaco y sus derivados viene siendo una constante en Chequia durante los últimos años, algo que, sin embargo, no ha conseguido hacer aumentar la recaudación estatal, sino todo lo contrario.
Si bien el gobierno de Petr Fiala había previsto obtener 2.600 millones de euros para el presupuesto del pasado año, finalmente, esta cantidad fue sensiblemente inferior: unos 500 millones de euros menos.
"En 2023, el Estado recaudó sólo 2.138 millones de euros en impuestos especiales sobre el tabaco. Se ha demostrado que los fuertes aumentos de impuestos causan inestabilidad. Desde el punto de vista de la preservación de los ingresos del presupuesto estatal, siempre es mejor aumentar suavemente los impuestos al consumo de tabaco, ya que a largo plazo esto genera mayores ingresos", opinó el economista de BH Securities, Štěpán Křeček.
Varios expertos coinciden en que una mayor carga impositiva no siempre deriva en mayores ingresos, especialmente en productos como el tabaco. Por otra parte, también señalan que la merma en la recaudación de este ámbito puede responder a la ‘fuga’ de los consumidores hacia países vecinos, especialmente Polonia, y a la economía sumergida.
"Con el aumento de los precios de los productos del tabaco, también aumentaron los motivos para escapar al consumo exterior y a la zona gris. Los impuestos no pueden verse sólo desde el punto de vista contable y presupuestario, sino también desde el punto de vista económico. En resumen, no se trata de que una mayor imposición signifique mayores ingresos fiscales", confirma Martin Slaný, economista del grupo DRFG.
Por lo pronto, en Chequia los fumadores tendrán que asumir una nueva subida impositiva a partir de febrero, cuando se calcula que el precio de un paquete de cigarrillos aumentará una media de unos tres céntimos de euro.