Los caballos Przevalski regresan de Praga a las estepas de Mongolia
El Jardín Zoológico de Praga envió a Mongolia este lunes cuatro yeguas de la raza Przevalski. El objetivo es devolver estos animales salvajes de pequeño tamaño y color marrón a las estepas mongolas, su hábitat natural.
La preparación de las yeguas para el traslado llevó cierto tiempo, ya que fue necesario adaptarlas a la estancia en unos contenedores especiales durante el viaje, según destacó poco antes de la partida el director del Zoológico de Praga, Miroslav Bobek.
”En este tipo de actividades el éxito nunca está garantizado. Fue una tarea bastante complicada convencer a las yeguas que entraran voluntariamente en los contenedores. A última hora nos vimos obligados incluso a cambiar uno de los animales, ya que una de las yeguas estaba muy nerviosa, no quería colaborar y rechazaba entrar en el contenedor. Para no ocasionarle más estrés, decidimos enviar a Mongolia otro caballo. Y es imposible predecir cuántas complicaciones podrían surgir todavía durante el viaje”.Para mantener a los caballos en calma, les fue aplicada cierta dosis de calmantes y se les proporciona agua y zanahoria durante el viaje. El coste del traslado de los caballos Przevalski a Mongolia es de unos 35.000 euros y es financiado de las colectas públicas en apoyo a la cría de los caballos de la raza Przevalski y en parte de contribuciones voluntarias de donantes.
El Zoológico de Praga es uno de los principales organizadores del envío de los caballos Przevalski a su hábitat natural en Mongolia. Los primeros caballos de esa raza fueron enviados a las estepas de ese país en 1992. Durante los dos últimos años Chequia envió a Mongolia ocho yeguas para ampliar las manadas de ese caballo en la naturaleza, ya que la población total de este cuadrúpedo es de algo más de 1.000 ejemplares en el mundo entero. Una de las yeguas que llegó a Mongolia en 2011 ya dio a luz a una cría en Gobi.El centro para la adaptación de los caballos Przevalski en el desierto de Gobi se encuentra a unos 70 kilómetros de distancia de los lugares donde en 1968 fueron vistos los últimos caballos salvajes de esa raza.
El Jardín Zoológico de Praga que tiene al caballo Przevalski en su signo, se dedica a la reproducción y salvación de ese cuadrúpedo desde el año 1932. A partir de 1959 tiene a su cargo el libro genealógico mundial de esa raza animal.