“Las vacunas han demostrado ser seguras en menores de edad”
Dadas las reticencias a vacunarse contra el COVID-19 de una importante parte de la población checa, la edad de quienes pueden ir a hacerlo baja rápidamente. En cuestión de semanas les podría llegar ya el turno a todos los mayores de 12 años. Expertos como el epidemiólogo Roman Chlíbek consideran importante la vacunación de los niños para proteger a familiares y contactos cercanos.
En la República Checa pueden pedir cita de vacunación todos los mayores de 16 años desde hace unos días. El dato podría llevar a la conclusión errónea de que se están aplicando las inyecciones a mejor ritmo que en otros países de la Unión Europea. Sin embargo, la realidad es que todos han recibido cantidades similares de dosis en proporción a su población. La cuestión es que en Chequia desciende el interés en vacunarse de forma inversamente proporcional a la edad. Tanto, que ya se habla de empezar a vacunar, posiblemente en julio, a todos los mayores de 12 años cuyos padres así lo deseen.
Si bien los niños tienen menor riesgo que los mayores de enfermar gravemente o incluso morir de coronavirus, también puede llegar a suceder, y, además, la vacunación protegería a sus familiares cercanos más vulnerables, explicó a la Radio Checa Roman Chlíbek, presidente de la Asociación Checa de Vacunología.
“Claro que es importante para los niños enfermos crónicos o con alguna enfermedad conocida que podría empeorar por el coronavirus o que tienen problemas de inmunidad. Pero también será de mucha importancia para quienes quieran mejorar la inmunidad familiar porque estén en estrecho contacto con un familiar que sea enfermo crónico o con personas mayores. Es siempre mejor que esté vacunado el mayor número de miembros de la familia”.
Sin embargo, se cree que serán muy pocos los menores de edad que se vacunen en Chequia. Un dato al respecto resulta muy gráfico: en el rango de edad entre 35 y 50 años, donde están muchos de los padres de niños de, por ejemplo, 12 o más años, solo alrededor de la mitad han pedido cita de vacunación. Si no se van a inmunizar ellos, resulta impensable que lo soliciten para sus hijos.
Todo tipo de teorías y temores que corren por la red y los teléfonos móviles tienen la culpa. El epidemiólogo Roman Chlíbek, sin embargo, no tiene la menor duda de la seguridad de las vacunas aprobadas por la Agencia Europea del Medicamento.
“Se han hecho estudios y se siguen haciendo, tanto con niños de 12 años como mucho menores. Que se haya hecho rápidamente la vacuna no quiere decir que sea de menor calidad o que se haya pasado algo por alto. Todo se ha hecho como debía hacerse. Con todos los nuevos vacunados, también los niños, no tenemos –ni podemos tener– datos de un seguimiento a largo plazo. Esto siempre tarda cinco, diez o quince años. Pero con ninguna enfermedad podemos esperar quince años. Además, si todo el mundo tuviera esa actitud y no se vacunara hasta tener todos los datos, nunca llegaríamos a tenerlos. Las vacunas han demostrado ser seguras en menores de edad, por eso han sido registradas”.
Las vacunas para menores de 12 años en adelante han sido ya aprobadas para su uso en la Unión Europea así como en Estados Unidos o Israel, donde incluso ya han empezado a ser vacunados. Para todos los padres temerosos, recomienda Chlíbek acudir al pediatra de su hijo y hacerle todas las preguntas que consideren, ya que es la persona más indicada para responderlas.
En cuanto a la vacuncación de niños menores, incluso bebés, es una cuestión que avanza lentamente aún, cuenta Roman Chlíbek.
“Por el momento los estudios son realmente escasos. En este caso, las que van más adelantadas son las vacunas chinas, por ejemplo de la empresa Sinopharm. Allí se están haciendo estudios con niños de tres años en adelante, pero creo que en Europa aún vamos a tener que esperar a una vacuna para niños tan pequeños, y si llega, será a finales de este año”.
Otro experto preguntado por la Radio Checa, el bioquímico Jan Trnka, advierte de que la inmunidad colectiva se alcanzará solo si se vacuna a un 80% de la población. Por el momento, la impresión es que Chequia se quedará lejos de esos niveles y no solo por los niños, desde luego, ya que únicamente los mayores de 60 años han demostrado tanto interés por ser vacunados.