Las tumbas de guerra checas se encuentran desde Francia hasta Filipinas
Miles de tumbas de guerra checas se encuentran dispersas en muchas partes del mundo y Chequia intenta preservarlas.
Hay miles de tumbas de guerra checas en todo el mundo y un mapa interactivo las recoge en un solo lugar. De ellas, alrededor de 38.000 están localizadas en la República Checa y 4000 en el extranjero, y de su protección se encarga el Ministerio de Defensa Checo. Es interesante, sin embargo, determinar la definición de una tumba de guerra. Esto puede variar de restos de una tumba a una lápida. En este caso, es posible que un soldado tenga más de una tumba de guerra, por ejemplo, una en Francia y otra en su lugar de nacimiento. Pavel Kugler del Departamento de Veteranos y Tumbas de Guerra del Ministerio de Defensa explicó que el mayor número de tumbas datan de la Primera y la Segunda Guerra Mundial.
“La tumba más antigua que está oficialmente registrada, es de la batalla de Moravské pole en 1278 donde murió el rey Otakar II de Bohemia. Sin embargo, tenemos en cuenta también las tumbas de guerra de conflictos contemporáneos como por ejemplo de Afganistán o Yugoslavia. La variedad es enorme y embarca varios siglos”.
Durante la Primera y la Segunda Guerra Mundial, miles de checos encontraron su muerte en Francia y en Bélgica. Para hacer una comparación, después de Eslovaquia, Francia es el país con mayor número de soldados checos caídos en el extranjero. Por otro lado, en la República Checa han sido halladas muchas tumbas de guerra alemanas y rusas. Primero estas pasan por estudios arqueológicos, luego el Gobierno checo trata de contactar a las autoridades alemanas o rusas para asegurarse del si estos soldados han sido sepultados apropiadamente. Además, a finales de los años 90, un acuerdo entre la República Checa y la Federación Rusa garantizó la cooperación mutua en cuestión de la preservación de las tumbas de guerra del otro país. Kugler contó que este acuerdo suponía la creación de una comisión de tumbas de guerra checo-rusa que se reuniría por lo menos una vez por año.
“Desde el año 2017 ninguna reunión ha tenido lugar. Rusia sostuvo que esto se debe a que la República Checa haya retirado el monumento del mariscal ruso Konev en Praga. Hasta el momento, estamos siguiendo la situación de las tumbas de guerra en Rusia. Por otra parte, muchas tumbas allí han sido restauradas o reconstruidas. En algunas áreas de esta cooperación, no hemos tenido problemas graves. Asimismo, hemos podido reconstruir las tumbas en regiones como Volga o Samara en Rusia, pero todavía no las hemos puesto en sus lugares de origen y desde hace años se encuentran en un almacén”.
Kugler dijo que esta es una situación muy complicada, afirmó que por el momento el Ministerio de Defensa Checo no tiene ninguna información sobre tumbas de guerra checas destruidas. Asimismo, Kugler recalcó que uno de los propósitos de su departamento es mantener el recuerdo de todos los que perdieron sus vidas en las batallas. Al mismo tiempo reconoció que en muchos casos, aunque los soldados eran de la misma nacionalidad, algunos murieron como legionarios, mientras que otros, como soldados austro-húngaros. Ahora, la misión es desarrollar una base de datos en cooperación con el Archivo de la Historia de las Guerras y con el Instituto de Historia de las Guerras. Se espera que este sistema contendrá información sobre cada soldado y su tumba. Además, Kugler destacó que las tumbas de guerra checas han sido halladas en más de 45 países como Filipinas, Australia, Japón, las Bermudas y Panamá. Por ejemplo, muchos checoslovacos luchaban junto con los franceses durante la guerra de Vietnam.
“El investigador Ladislav Kudrna del Instituto para el Estudio de los Regímenes Totalitarios ha evidenciado que alrededor de 1500 checoslovacos participaron en la guerra de Vietnam y de ellos 300 perdieron la vida. Después de ambas guerras mundiales, este es el mayor número de checoslovacos que tomaron parte en algún conflicto militar en el extranjero. Nos encantaría rendirles homenaje si llegamos a algún tipo de acuerdo con Vietnam”.
Kugler espera que la República Checa continuará colaborando con países de todo el mundo con el fin de preservar la historia para las generaciones actuales y posteriores.