La torre del palacio de Český Krumlov recuperará su campana tras más de un siglo
La campana barroca de San Francisco fue destruida durante la Primera Guerra Mundial. Ahora una réplica, creada en base a fotografías históricas, recuperará su sitio en la torre del palacio de Český Krumlov, también gracias a contribuciones de los habitantes de la ciudad.
Después de 104 años, el palacio de Český Krumlov, una de las ciudades más pintorescas de Chequia, recuperará la campana que perdió durante las luchas de la Primera Guerra Mundial. La campana original fue destruida en 1917, cuando los soldados la fundieron para fabricar armas.
Ahora, la campana barroca de San Francisco ha renacido en un taller en Myslkovice en Bohemia del Sur. El campanero Michal Votruba utilizó fotografías históricas y creó una réplica, en algunos aspectos idéntica a la original, según cuenta.
“No se trata de una réplica exacta al cien por cien en cuanto al tamaño o el peso. Pero sí es fiel en las decoraciones y la forma del asa de la campana”.
La campana histórica contaba con decoraciones especiales que hacían referencia a su origen y también al santo a la que fue consagrada, según prosigue Votruba.
“En un lado de la campana aparecía Jesucristo crucificado, del otro un relieve de San Francisco de Asís. Y a lo largo de la parte de arriba había un motivo repetitivo de racimos de uvas. En la parte superior también vemos la inscripción original, que informa que la campana fue moldeada en České Budějovice en 1744.”.
Para marcar el renacimiento de la campana, una segunda inscripción ha sido grabada en la parte inferior. Incluye, en latín, el nombre de su autor y la fecha de su creación.
Fundir el material necesario para fabricar la campana de aproximadamente ochenta kilos tardó unas dos horas, la propia fundición del instrumento solo unos minutos. Una vez vertido el líquido hizo falta esperar dos días para que se enfriara. Solo después es posible descubrir el sonido que resonará por las calles de Český Krumlov en el futuro. El tono depende del espesor de la campana y también de su tamaño, es decir del diámetro de la parte inferior, pero según afirma Votruba, a pesar de su experiencia, el resultado a veces le sorprende.
La fundición de la nueva campana fue posible gracias a la iniciativa de varios ciudadanos de Český Krumlov, quienes lograron reunir los fondos necesarios. De acuerdo con Ladislav Pouzar, del grupo Proradost, la campana de la torre del palacio es solo una de muchas de las que se perdieron durante el curso de la historia.
“En Český Krumlov siguen faltando varias campanas. Por eso decidimos devolver a su sitio una de ellas. Y los habitantes de la ciudad estarán contentos de haber participado en el proceso”.
La vieja-nueva campana volverá a la torre del palacio de Český Krumlov el 3 de octubre, en la víspera del día de San Francisco. Será colgada en el mismo yugo que su predecesora barroca, creando así una unión entre la historia y los tiempos modernos.