La República Checa importará carne de res a la UE

El comisario de la Unión Europea para la agricultura, Franz Fischler, deliberó ayer en Praga sobre las exportaciones checas de carne de res a la Unión Europea, así como sobre el programa Sapard para el desarrollo de la agricultura.

La Unión Europea
Franz Fischler firmó con el ministro de Finanzas checo, Pavel Mertlík, un acuerdo sobre la financiación del programa Sapard para los años 2002 - 2006 por un valor de 154 millones de euros, destinado a la financiación de las inversiones en la esfera agrícola. La República Checa se convirtió este lunes en el primer país candidato a la Unión Europea que firmó los convenios anual e interanual.

"Tras la firma del acuerdo Sapard, los interesados podrán recibir ayuda financiera a través de una agencia especializada creada para tales fines. No obstante, la acreditación de la agencia representa un proceso difícil que durará, como mínimo, varios meses. Sin embargo, este proceso es necesario para comprobar la capacidad de la agencia e impedir la malversación del dinero. La aprobación del programa Sapard representa una gran tarea para la República Checa y también para la Unión Europea," dijo Franz Fischler.

En Praga fue acordado además, que la República Checa podrá seguir exportando la carne de res a los países comunitarios, al tiempo que Praga no debería impedir las importaciones de carne de los países de la Unión.

A finales del año pasado la República Checa prohibió las importaciones de carne de res y sus derivados y harinas animales de prácticamente todos los países de la Unión Europea. El Ministerio de Agricultura checo aseguró que con este paso persigue proteger al país de la enfermedad de "las vacas locas". Y con éxito, puesto que la República Checa figura entre los pocos países europeos que hasta el momento no ha registrado ni un solo caso de la encefalopatía bovina espongiforme.

Sin embargo, el Comisario de la UE insistió en que el bloqueo de las importaciones no representa la solución del problema. Según Fischler, la carne de res proveniente de los países comunitarios reúne todas las condiciones sanitarias. Sin embargo, el ministro de Agricultura checo, Jan Fencl, considera que la prohibición de las importaciones defiende los intereses de los consumidores checos.