La producción industrial cae más de un 30 % interanual en Chequia
La producción industrial ha registrado en la República Checa una súbita disminución interanual de un 33.7 %. La caída se ha dado en todos los sectores siendo la más afectada la producción de automóviles.
Datos publicados por la Oficina Checa de Estadística (CSO) indican que la República Checa ha acusado la mayor caída de su producción industrial desde 2001. La pandemia de coronavirus obligó a varias empresas a parar sus líneas de producción. Según los analistas, la industria checa tendrá un desempeño débil durante el resto del año, pero según ellos la dura caída de abril podría empezar a superarse en los próximos meses.
La producción de la construcción cayó también en abril y el comercio exterior registra un déficit preocupante. "La producción industrial registró el mayor descenso anual de la historia checa en abril y superó el descenso anual más significativo del 22 % desde febrero de 2009, cuando culminó la crisis financiera mundial", dijo el economista jefe de ING Jakub Seidler.
Por otro lado, la caída histórica no es sorprendente porque según Seidler la mayoría de las empresas fabricantes de automóviles se cerraron durante abril, aunque a mediados de mes reanudaron la producción en Hyundai, pero tampoco a plena capacidad.
"Según los datos publicados anteriormente por AutoSAP, la disminución anual de la producción de automóviles en abril fue del 89 %, esto quiere decir menos de 15000 automóviles producidos, mientras que en promedio se producen alrededor de 120 000 coches por mes en la República Checa", agregó Seidler.
El mal resultado de abril no es una gran sorpresa para el economista de Komerční Banka Michal Brožka. "Tomando en cuenta la debilidad de la industria en Polonia y Hungría esperábamos números muy malos". La pregunta es qué tan rápido revivirá la producción industrial a medida que las operaciones comiencen de nuevo ", afirma Brožka.
Sin embargo, las plantas industriales, incluida la producción de automóviles, han comenzado a abrirse gradualmente en abril y, según los analistas, las cifras deberían ser mejores en mayo.
"El freno principal es la limitada demanda externa. Para todo este año, esperamos una disminución de la industria en un 14 % y esperamos que regrese a los niveles previos a la pandemia en 2022", agrega Brožka.
Según el analista de Raiffeisenbank Luboš Růžička el comercio exterior experimentó en abril medidas de cuarentena que solo permitieron un tráfico muy limitado en los cruces fronterizos. En comparación con marzo, las medidas restrictivas estuvieron vigentes durante todo el mes de abril, por lo que las estadísticas arrojaron cifras negativas en toda la industria en general.