La misión checa Slavia buscará materias primas en el espacio
Subir a la órbita de la Tierra dos microsatélites equipados por tecnologías avanzadas para la búsqueda de fuentes de materias primas en el espacio. Esta es la meta de la misión espacial checa Slavia.
Científicos checos han concluido la fase preparatoria para una misión espacial denominada Slavia. Esta pretende buscar materias primas en el espacio. Dos microsatélites analizarán directamente en la órbita la composición de materias primas en los asteroides, para luego poder ser extraídos y aprovechados, por ejemplo, en la industria terrestre.
Los microsatélites se asemejan a una gran caja de zapatos con antenas para identificar las materias primas en el espacio, y unas alas con paneles solares, gracias a los que los satélites obtienen la energía para su vuelo. A bordo llevan tres aparatos que tienen nombres checos, una cámara que se denomina VESNA, el espectrómetro de masas HANKA y las antenas se denominan ŘÍP-2.
Cada uno de ellos tiene un rol insustituible en la búsqueda de las fuentes de materias primas y su posterior análisis, según dijo a la Radio Checa Martin Ferus, jefe del equipo científico, del Instituto de Química Física de la Academia de Ciencias Checa.
“Por ejemplo, la cámara sigue durante el vuelo del microsatélite los cuerpos en el espacio y lo hace desde un cierto ángulo, al igual que la cámara del otro microsatélite. Sus campos visuales se entrelazarán en un momento determinado en la atmósfera y gracias a ello seremos capaces de definir la trayectoria del cuerpo seguido por las cámaras. En vista de que habrá también una notación espectral, podremos determinar la composición del cuerpo en cuestión”.
Son varios los motivos por los que se hace importante saber si en el espacio hay fuentes de materias primas. Se calcula que en el curso de los próximos diez años los hombres volverán a la Luna y de allí podrían seguir a Marte o a otros lugares del sistema solar. Estos ambiciosos planes deberían contar con el aprovechamiento de fuentes de agua o materias primas directamente de la Luna, Marte o los asteroides próximos a la órbita de la Tierra, para no tener que llevar todo desde ‘casa’. En caso de ser desarrollada la minería espacial y se llegaran a extraer materias primas de los asteroides, estas podrían ser utilizadas en el futuro también en la industria terrestre, en vista de que las fuentes de materias primas en la Tierra se podrían ir acabando, según subrayó Martin Ferus.
“Slavia abarca tecnologías avanzadas a ser aprovechadas en la prospección de las fuentes de materias primas en cuerpos cercanos a la Tierra, pero tiene también otros objetivos científicos. Por ejemplo, analizará el surgimiento del sistema solar. O sea, que nuestra tarea consistía en solucionar el cumplimiento de esas tareas desde el punto de vista tecnológico y estoy convencido de que lo hemos logrado”.
De acuerdo con Ján Žabka, otro de los científicos del Instituto de Química Física que colabora en el proyecto, Slavia es el primer programa espacial en el que el análisis de masas de las muestras obtenidas en una misión espacial se llevará a cabo directamente en el espacio y no en laboratorios después de llegar a la Tierra.
Sin embargo, la minería espacial es todavía un tema del futuro, ya que carece de un marco judicial, como dijo a la Radio Checa Nikola Schmidt, del Instituto de Relaciones Internacionales.
“Desde el punto de vista del derecho internacional este tema realmente no está estipulado por ley. Nos basamos en el Tratado sobre la Exploración Espacial Internacional suscrito en 1967, pero éste no es lo suficientemente explícito en lo que respecta a si es posible practicar la minería espacial o no. O sea, se puede extraer, pero no está claramente definido quién sería el dueño legítimo de las materias primas explotadas”.
La misión Slavia está auspiciada por la Agencia Espacial Europea (ESA) y respaldada por el Ministerio de Transportes checo, y es uno de los siete ambiciosos proyectos espaciales promovidos por la República Checa. La salida de los dos microsatélites al espacio en búsqueda de materias primas está prevista para el año 2027.