La Casa de la Moneda Checa produce una serie única de medallones de oro destinados a la inversión
La inflación general ha empujado a la Casa de la Moneda Checa a promover la compra de oro y ha acuñado medallones por valor de medio millón de euros para inversores privados.
La inflación se ha disparado estos últimos meses, razón por la cual es un buen momento para la inversión de dinero en diversos productos. La Casa de la Moneda Checa, en la ciudad de Jablonec nad Nisou, acaba de dar a unas pocas personas la oportunidad de invertir la cantidad de medio millón de euros en una serie de medallones.
La Casa de la Moneda se estableció en 1993 y es a día de hoy uno de los líderes en su campo. Su último logro es este: Una moneda de inversión única hecha de oro, la más grande y pesada jamás acuñada en la República Checa y en Europa. El director de dicha institución, Stanislav Bachtik, explica que la moneda tiene unas características muy concretas.
“Pesa unos diez kilos aproximadamente, mide 16,5 centímetros de diámetro y en ella se ha ilustrado, en relieve, el León Checo. Lo que hace especial a la moneda es el holograma de seguridad en forma de escudo que se puede ver a simple vista. Se trata del medallón de oro más grande jamás acuñado en el continente y puedo decir que fue sin duda la tarea más difícil que ha emprendido la Casa de la Moneda Checa”.
La idea de acuñar monedas de inversión más grandes que las habituales, que suelen medir 90 milímetros y tener un peso de unos 1000 gramos, se originó hace unos cuatro años. Mientras los expertos de la Casa de la Moneda de Jablonec trabajaban en una moneda más grande para el Banco Nacional Checo, descubrieron que los inversores privados también estaban interesados en piezas excepcionalmente más grandes para invertir en ellas.
Para la institución, satisfacer esta voluntad significó comprar una prensa hidráulica especial, hecha por encargo y a medida. Se trata de la única de este tipo en el mundo. Y es que la fuerza necesaria para acuñar monedas de este tamaño es astronómica: La máquina debe ejercer la misma presión que necesitaría para comprimir varios miles de automóviles. Además, solo tres casas de moneda en el mundo tienen el equipo para producir piezas de este tamaño, y se encuentran en Canadá, China y Australia.
Hace unos años, la Casa de la Moneda de Jablonec produjo una moneda que pesaba un kilogramo. El año pasado fue un poco más allá y produjo una edición especial de inversión con monedas de cinco kilos. Esta vez ha producido la serie de diez kilos, la primera pieza de la cual se forjó hace unos días delante de una audiencia de invitados VIP y periodistas. Los otros cuatro medallones aún están en construcción, pero ya se han vendido todos.
Aunque las monedas del León Checo son principalmente para la inversión, también tienen un valor artístico. El autor del diseño, Asamat Baltaev, ha creado cada vez una versión nueva del animal para la Casa de la Moneda con la intención de marcar cada serie y hacerla atractiva para los inversores privados.