Iñaki Elizalde presenta en Praga y Pilsen su película ‘Baztán’
El director español Iñaki Elizalde está presentando en la República Checa, en Praga y Pilsen, su ópera prima, ‘Baztán’. La película retrata el desconocido drama de los agotes, un grupo racial discriminado durante diez siglos en el norte de Navarra. Una historia local contada en pasado y presente, pero un tema universal dice el director.
La película es una ficción que tiene lugar tanto en el siglo XVII como en el presente, pero que muestra la realidad del valle de Baztán, en el norte de Navarra, en España. Un valle muy cerrado, dice el director, donde se practicó algo próximo a la esclavitud hasta hace no tanto tiempo.
“Hubo una mayoría que habitaba el valle que tuvo a una minoría casi secuestrada. Desde el principio los recluyeron en un gueto y les hacían todo tipo de perrerías. No podían tener ganados ni casa. No podían mezclar su sangre con la de la gente del valle, no podían ir a la iglesia ni enterrar a sus muertos en el cementerio. Decían que tenían rabo como el diablo y que allí por donde pisaban no volvía a crecer la hierba. Eso es así y de hecho cuando fuimos a rodar la segunda vez, una señora agote salió del espacio donde viven, que se llama Bozate, y nos dijo: ‘Ya venís aquí a contar nuestras miserias”. La película está protagonizada por actores bien conocidos del cine español, como el ganador de dos premios Goya, Carmelo Gómez, y Unax Ugalde, que incluso rodó para Miloš Forman en ‘Los Fantasmas de Goya’.El idioma vasco en el siglo XVII en el valle de Baztán, los bellos paisajes del lugar o las costumbres de sus habitantes son elementos que recoge la película. Pero la temática es universal y fácilmente comprensible para el espectador checo, dice Elizalde.
“A mí lo que me interesó es el carácter universal de la propia historia. En definitiva no deja de ser una historia de exclusión social que lamentablemente se ha repetido históricamente y se repetirá en el futuro y es extrapolable a cualquier otra historia parecida. Por otro lado también me llamó muchísimo la atención que se hubiera mantenido durante tantísimo tiempo sin que nadie se enterara. Yo vivo a 52 kilómetros del valle de Baztán y no conocía nada”. El proyecto surgió precisamente de algunos agotes que quisieron que se hablara de su exclusión, ahora que afortunadamente casi ha desaparecido por completo. El director navarro adaptó esa premisa a la película que quería hacer.“Me llegó el proyecto para poder hacer algo que fuera de época, pero a mí no me apetecía mucho, y no me apetecía hacer algo especialmente doloroso, sino algo mucho más optimista. Hice esta propuesta y fue la que se filmó. En definitiva la película, más que de agotes y de discriminación racial, habla del paso del tiempo, de lo que nace, de lo que muere, y de lo que a pesar de morir, permanece en el inconsciente, en el inconsciente colectivo. A partir de ahí también hay una reflexión sobre el propio oficio de cineasta”.
Tras las proyecciones que marcaron el estreno de ‘Baztán’ en San Sebastián, y ahora también en República Checa y Alemania, el filme espera sin embargo para ser mostrado normalmente en cines.