Gobierno checo aprueba ley para prohibir el tabaco en todos los bares y restaurantes
El Gobierno checo aprobó un proyecto de ley para prohibir fumar en todos los restaurantes y bares del país a partir del próximo año. Hasta la fecha la República Checa sigue siendo uno de los pocos países de la Unión Europea que no ha puesto en vigor la prohibición recomendada por Bruselas.
Los ministros de Salud que han alternado en los últimos 25 años hablaron del problema que representa el tabaquismo para la salud de la población, pero toparon siempre con trabas, por ejemplo por parte del Ministerio de Finanzas.
En su sesión de este miércoles el Gobierno aprobó el proyecto de ley que prohíbe fumar en todos los restaurantes y bares del país a partir del próximo año.
El ministro de Salud, Svatopluk Němeček, saludó la aprobación de la ley que deberá ser todavía respaldada por el Parlamento y ratificada por el presidente de la República, Miloš Zeman.“Se trata de un paso en la dirección correcta. Con esta ley Chequia emprenderá el camino en el que ya se encuentra la mayoría de los países de Europa Occidental”.
El ministro rechazó los argumentos de aquellos que aseguran que la prohibición afectará a muchos dueños de bares y restaurantes que debido a la pérdida de clientela tendrán que cerrar.
“La medida aplicada en otros países no ha sido negativa para los dueños de bares y restaurantes. Se trata de que debemos proteger la salud de los no fumadores y de los empleados de dichos lugares”.El presidente de la República, Miloš Zeman, adelantó que ratificaría la ley, pero es partidario de una solución diferente.
“Una solución aceptable es que en los restaurantes, que como mínimo dispongan de dos salones, uno sea para fumadores y el otro para no fumadores”.
La ley aprobada por el Gobierno prohíbe que se fume en restaurantes, bares, salas de concierto e instalaciones deportivas cubiertas. Novedoso resulta que la ley obligará a los bares a ofrecer una bebida no alcohólica a un menor precio que la bebida alcohólica más barata.
Cada año mueren en el mundo seis millones de personas por tabaquismo, de las cuales 600.000 son fumadores pasivos afectados por respirar el humo ajeno.