Gobierno aprueba ampliar restricciones a circulación de camiones

El Gobierno checo aprobó la enmienda a la Ley de Tránsito, que persigue extender a todo el año las restricciones a la circulación de camiones, que hasta el presente sólo se aplicaban en verano. Los transportistas se oponen a esta medida y amenazan con realizar acciones de protesta.

La nueva Ley de Tránsito prohibirá a los camiones cuyo peso supere las 7,5 toneladas salir a todo tipo de las carreteras checas los viernes entre las 15 y las 18 horas y los domingos durante casi todo el día, a lo largo de todo el año. Hasta ahora, las restricciones se aplicaban en autopistas, autovías y carreteras principales en los meses de julio y agosto.

Los transportistas del país protestan contra la introducción de dicha medida. Según Martin Špryñar, secretario general de la asociación de transportistas checos ČESMAD Bohemia, las restricciones son absurdas, especialmente los viernes.

“Siempre decíamos que las restricciones de los domingos no suponen gran problema, las de los sábados pueden debatirse, pero las de los viernes resultan inaceptables para nosotros”, destacó Špryñar.

Sin embargo, habría varias excepciones a la prohibición. Por ejemplo, los camiones que transporten productos perecederos, animales vivos y ayuda humanitaria podrían circular por el país sin limitación alguna.

Martin Špryñar   (Foto: CTK)
Además, la ley permitiría a las empresas conseguir con mayor facilidad una excepción extraordinaria, señaló el viceprimer ministro del Gobierno, Jiří Čunek.

“La enmienda a la Ley de Tránsito, que fue aprobada por el Gobierno, es el resultado de un acuerdo entre el ministro del Medio Ambiente Martin Bursík y el ministro de Transportes, Aleš Řebíček. Por un lado, extiende las restricciones, pero por otro, simplifica considerablemente el proceso de obtención de excepciones”, resaltó Čunek.

Martin Bursík, presidente del gubernamental Partido de los Verdes, amenazó varias veces que su formación se retiraría del Gobierno en caso de que el proyecto no fuera aprobado.

Los transportistas consideran el acuerdo entre Bursík y Řebíček como un negocio político. Esperan que el Parlamento no ratifique la enmienda y que opte por el proyecto de la principal rival de Bursík, Věra Jakubková, que propone en vez de las restricciones aumentar el peaje los viernes.