Ganarse la vida entre un violonchelo y un camión
Trabajar a tiempo completo no implica poder cubrir las necesidades básicas en la República Checa. Los músicos de orquesta figuran entre los más afectados y la mayoría de ellos se ve en la obligación de tener dos trabajos. Esta calamidad la viven también empleados de otros sectores.
"Yo vivo en un apartamento que me quedó de mi mamá. Los gastos mensuales, básicamente, se llevan todo mi sueldo. No hablo de comida y de otras cosas, es decir, si trabajara solo aquí me moriría de hambre".
Jasinská es una músico de conservatorio, dedicada a la orquesta desde los siete años. Aunque su trabajo en esta es de jornada completa tuvo que encontrar otra fuente de dinero para mantenerse. Cuando no está tocando maneja camiones y muchas veces lleva de copiloto su instrumento, para ensayar en los ratos de descanso en las carreteras.
El sueldo que recibe en la orquesta a fin de mes termina siendo de unos 315 euros. La violonchelista nos cuenta que entre sus compañeros es posible encontrar una variedad de segundos trabajos."Tenemos casos de gente que incluso un año antes de la jubilación están recibiendo el sueldo mínimo. Algunos trabajan en cocinas, en construcción, guias turísticos. Así que yo no soy la única que maneja camiones". El presidente de la Unión de Músicos Orquestales, Jiří Dokoupil, explica para TV Checa lo que él considera que es la naturaleza del problema.
"El problema está principalmente en que actualmente la mitad de nuestro financiamiento depende del presupuesto público. Necesitaríamos un mayor porcentaje por parte del Estado. El primer Ministro, Bohuslav Sobotka, nos prometió que a través del gobierno trataría, de alguna manera, impulsar una mayor implicación del Estado en el financiamiento".
La insuficiencia del sueldo no es un drama exclusivo de los músicos. Otros empleados, como cocineros de comedores y cajeros de supermercados enfrentan el mismo problema. Muchas empleadas no realizan otro trabajo, pero dependen de su esposo para vivir dignamente. Los sueldos bajos comiezan a ser un problema en la esfera política checa y las quejas de los empleados van en aumento.