Fuertes medidas de seguridad se aplicarán durante cumbre de la OTAN en Praga
Francotiradores en los tejados, hombres rana en el río Moldava, cientos de agentes vestidos de paisano, alcantarillas selladas y controles permanentes, estas son algunas de las medidas de seguridad que se aplicarán con motivo de la cumbre de la OTAN de noviembre en Praga.
Los máximos representantes de los países miembros de la OTAN se darán cita en la capital checa en una reunión cumbre histórica, puesto que tiene lugar en uno de los países que hace más de una década se encontraba tras la cortina de hierro.
Volviendo al tema de las medidas de seguridad cabe agregar que se trata de las mayores tomadas en el país en tiempos de paz. El diario Lidové Noviny informó que el presidente estadounidense, George Bush, se alojará en uno de los grandes hoteles de la capital checa. Los especialistas en la materia aseguran que el hotel se convertirá prácticamente en una fortaleza infranqueable. Medidas similares se tomarán en ocho hoteles capitalinos en los que se alojarán otros presidentes, primeros ministros y ministros de Relaciones Exteriores.
Tras la caída del muro de Berlín y de la desaparición de la "Cortina de Hierro", la OTAN necesita reformar una serie de aspectos para mejorar su funcionamiento. Porque si bien durante la Guerra Fría el principal enemigo era la hoy extinta Unión Soviética y sus satélites, hoy el nuevo peligro lo representa el terrorismo internacional.
Los sucesos del 11 de septiembre exigen una serie de cambios dentro de la OTAN, tanto estructurales, como de funcionamiento, de su política de alianzas, sin olvidar la táctica y la estrategia. Todo esto será tema de análisis en la reunión cumbre de la OTAN a celebrarse eel 21 y 22 de noviembre próximos.
