Fuertes inundaciones afectan a la República Checa

Prachatice, Bohemia del Sur, Foto: CTK

Inundaciones azotan la República Checa. Ocho personas muertas y daños materiales que ascienden a millones de euros es el resultado que hasta el presente arroja la catástrofe natural.

Vladimír Spidla,  Josef Blazek y Stanislav Gross,  Ceske Budejovice,  Foto: CTK
El primer ministro checo, Vladimír Spidla, declaró el tercer grado de emergencia en Praga, Bohemia Central, Bohemia del Sur, y los distritos de Pilsen y Karlovy Vary. Hasta el momento fueron evacuadas aproximadamente 50 mil personas.

Varios barrios de Praga han resultado inundados, entre ellos una parte del casco histórico de la ciudad. Este martes a las 8 de la mañana fue cerrado el Puente de Carlos. Los habitantes que viven en las zonas más amenazadas, sobre todo en las cercanías del río Vltava, tuvieron que abandonar sus hogares.

El transporte público es gratuito para que todos los ciudadanos puedan utilizarlo al salir de las zonas afectadas por las riadas. No obstante, varias líneas de autobuses y tranvías fueron interrumpidas y algunas estaciones de metro están cerradas. Los empleados del metro advierten a los pasajeros que mantengan la calma y respeten el plan de evacuación.

Prachatice,  Bohemia del Sur,  Foto: CTK
Ricardo Svoboda que trabaja en una empresa de telecomunicaciones con sede en el barrio de Karlín en Praga compartió con nosotros sus impresiones sobre la evacuación.

"En la mañana de este martes me dirigí a mi centro de trabajo. Viajé en metro, luego en tranvía, ya que en algunas estaciones el metro no paraba. Y entonces me di cuenta de que la mayoría de las tiendas del barrio estaban cerradas, y que los habitantes locales abandonaban sus hogares respondiendo a un llamamiento de las autoridades municipales. Al llegar al trabajo, me dijeron que la empresa se estaba evacuando. La dirección de la empresa envió a todos los empleados a casa, debido a que el agua ya se encontraba en los sótanos del edificio."

Su casa tuvo que abandonarla también Daniela Marsálková, una de las vecinas de la zona de Kampa en Praga, situada en las inmediaciones del río Vltava.

"Decían que el agua subía hasta la primera planta de nuestro edificio, así que antes de salir traté de salvar al menos algunas cosas. Subí a los pisos superiores mi televisor, algunos libros y otras cosas que en esos momentos se me había ocurrido poner a salvo."

Kampa,  Praga,  Foto: CTK
Bohemia Occidental también está afectada por las inundaciones. Las aguas de los ríos locales se desbordaron y causaron enormes daños. En el distrito del centro termal de Karlovy Vary hemos conversado con la propietaria de un restaurante.

"Se me inundó todo el restaurante, logré salvar algunos muebles y alcancé a desconectar la corriente eléctrica, pero el agua destruyó todo lo demás."

La región más afectada por las crecidas de los ríos es Bohemia del Sur. La situación en la zona nos la describe nuestra enviada especial, Pavla Jedlicková.

"Estoy en una aldea de apenas 800 habitantes a 10 kilómetros de la ciudad de Strakonice, Bohemia del Sur, es decir zona inundada. En la ciudad de Strakonice, así como en toda la región, fue declarado el estado de emergencia y las autoridades locales de Strakonice, donde confluyen dos ríos que salieron de sus cauces, Otava y Volynka, ordenaron la evacuación del centro de la ciudad, medida que afectó a unas 4300 personas."

En ayuda a las zonas afectadas de Bohemia del Sur acudieron este martes varios cuerpos de bomberos de otras regiones del país. Los bomberos de la ciudad de Hradec Králové, Bohemia Oriental, señalaron que en estos difíciles momentos les resultarán útiles las experiencias adquiridas en las operaciones de salvación efectuadas durante las inundaciones sufridas por el país en 1997 y 1998.

"Nuestra principal tarea es la de ayudar a salvar vidas humanas. Después de que bajen las aguas en los ríos en Bohemia del Sur, ayudaremos también en la eliminación de los daños causados por las inundaciones."

Los servicios meteorológicos pronostican que el estado del tiempo irá mejorando paulatinamente y que las lluvias irán amainando. Pese a ello, la población de la República Checa se mantiene en estado de alerta y preocupada por la situación surgida, ya que además de pérdidas humanas se registran cuantiosos daños materiales.