Fiscal general pide ayuda al Servicio de Inteligencia para impedir fuga de información
La fiscal general, Renáta Vesecká, pide que el Servicio de Inteligencia, BIS, examine la fuga de informaciones de la Policía y de las fiscalías que se produce últimamente con frecuencia en el transcurso de las investigaciones. La fiscal quiere impedir el abuso de estos datos en la lucha política.
"En el caso Cunek se trata de abusar de la Fiscalía del Estado en una lucha política por el poder", declaró la fiscal general, Renáta Vesecká, este domingo en un debate transmitido por la Televisión Checa.
"La Policía y la Fiscalía deben reunir pruebas, investigar, valorar las pruebas y decidir. La decisión debe ser absolutamente transparente. Rechazo rotundamente que se aproveche esas instituciones para obtener información que se use posteriormente en la lucha por el poder".
Vesecká señaló la fuga masiva de información como un ataque contra la fiabilidad de los órganos involucrados en el procedimiento penal. Por ello decidió dirigirse al primer ministro, Mirek Topolánek, para que encargue al Servicio de Inteligencia la inspección de esas fugas de datos.
El jefe de la Comisión Parlamentaria para el Control del BIS, Jeroným Tejc, del Partido Socialdemócrata, opina que la utilización del Servicio de Inteligencia para dicho caso contradiga la ley, al no verse amenazada la seguridad de la República Checa. Esta opinión la comparte el líder de los socialdemócratas, Jirí Paroubek.
Por su parte, el portavoz del BIS, Jan Subert, sostuvo que es posible que el Servicio de Inteligencia asuma esa tarea en caso de recibir un impulso de parte del Gobierno o del presidente de la República.
"No somos investigadores, no podemos llevar a cabo una investigación. Pero si aparecen actividades que amenacen la democracia tenemos la obligación, dada por la ley, de ocuparnos de las mismas", dijo Subert
El jefe del Gobierno Topolánek considera la solicitud de la fiscal general como justificada y este miércoles la presentará al Gabinete. El líder de los comunistas, Vojtech Filip, apuntó que Vesecká debe haberse dirigido al BIS ya hace un año y medio cuando antes de las elecciones parlamentarias se produjo la fuga de datos del informe del jefe del Departamento de Lucha contra el Crimen Organizado, Jan Kubice, que indicaba la conexión entre la mafia y algunos representantes de la administración pública.