Fiebre electoral de martes por la noche en la República Checa

Josef Klech (dra.) y subalcalde Jaroslav Zerotínský, foto: CTK

En los bares de Praga donde habitualmente se transmiten partidos de fútbol, los espectadores siguieron anoche en directo el duelo entre George Bush y John Kerry. Las elecciones presidenciales en EE. UU. han puesto "patas arriba" también la vida en un pueblo de la República Checa del que hasta hace poco ni los ciudadanos checos sabían donde está situado, Horní Benesov, en Moravia del Norte.

John Kerry,  foto: CTK
El lunes la Embajada de EE. UU. en Praga despachó el último envío de papeletas. El interés de los norteamericanos residentes en la República Checa por participar en las elecciones presidenciales superó todos los récords. La mayoría de ellos son partidarios del candidato demócrata. Ello pudo escucharse anoche en los bares capitalinos cada hora al anunciarse los resultados preliminares. Los cálculos a favor de Kerry fueron acompañados con aplausos, mientras que los votos para Bush con una ola de disgusto.

Una noche electoral se vivió también en Horní Benesov, en la región somontana de la sierra de Jeseník. El hecho de ser el lugar de nacimiento del abuelo de John Kerry convirtió al pueblo semidormido en el centro de atención de los medios de comunicación de toda Europa. Equipos de televisión de Finlandia, Alemania, Austria, Polonia, Irlanda o Macedonia ocuparon el jardín donde supuestamente se encontraba la casa natal del antepasado de Kerry.

Los habitantes de Horní Benesov han tomado la causa John Kerry como suya, sostuvo el alcalde Josef Klech, quien tampoco dejó escapar la transmisión de las presidenciales en EE.UU.

Josef Klech  (dra.) y subalcalde Jaroslav Zerotínský,  foto: CTK
"Nuestro pueblo tiene 2 430 habitantes. Tuvieron que enfrentarse a lo que se les vino encima como una avalancha, y poco a poco empezaron a percibir estas elecciones como un aporte para Horní Benesov. Siguen viviendo con sus problemas cotidianos, que son aumentados aún por el alto desempleo que alcanza el 17 por ciento".

Fritz Kohn, de origen judío, nació en Horní Benesov, entonces llamado Bennischi, en 1873. En 1901 solicitó el cambio de su apellido por Kerry, adoptando al mismo tiempo el cristianismo. Cuatro años más tarde cruzó el océano rumbo EE. UU. Su vida acabó trágicamente. En 1921, trabajando como zapatero, se suicidó en Boston. Su hijo John, padre del senador John Kerry, tenía seis años.

La casa donde vivió Fritz Kohn ya no existe. En su lugar los habitantes de Horní Benesov planean ubicar un placa conmemorativa y en la plaza central del pueblo quieren instalar un monumento a la democracia.