El transporte checo irá a la huelga el lunes 1 de marzo

El próximo lunes 1 de marzo se avecina una huelga de transportes a nivel estatal en la República Checa. La causa es el aumento de los impuestos que gravan las bonificaciones de los empleados. El paro afectará principalmente al ferrocarril y al transporte urbano de las grandes ciudades.

Se prevé que la semana que viene comience con un gran colapso en las carreteras. De momento la huelga de transporte durará de cuatro a nueve de la mañana y será seguida por todo el ferrocarril del país y por el transporte urbano de las grandes ciudades, aunque los maquinistas del metro de Praga dudan todavía si sumarse al paro.

La causa es que, desde el uno de enero de este año, todos los empleadores de la República Checa deben pagar mayores impuestos por las bonificaciones que dan a sus empleados. Los abonos de transporte o los vales de comida son ahora gravados tomando en cuenta su precio de mercado, no el precio reducido, como hasta el año pasado.

Por ejemplo, dar a los empleados pasajes gratis costaba en el sector del ferrocarril tan solo un euro en impuestos. Ahora más de 75. El resultado previsible es que las empresas dejen pronto de conceder estas bonificaciones.

La huelga se llevará a cabo a pesar de las gestiones del Gobierno para atajarla. Según el presidente de la Unión Sindical de Transporte, Luboš Pomajbík, todo se debe a la falta de compromiso de los diputados.

Jan Fischer y Luboš Pomajbík, foto: ČTK

“Ya avisamos sobre las causas de la huelga en diciembre, cuando señalamos lo injusta que era la nueva ley de Impuesto de Valor Añadido. Y en febrero el primer ministro Fischer dijo en la televisión que todo era un error tecnocrático. En la reunión tripartita de febrero se nos dijo que ese error se corregiría, pero hasta ahora los diputados no han cumplido el acuerdo”, criticó.

Precisamente era el uno de marzo cuando estaba previsto aprobar la enmienda de ley que eliminara estos impuestos a las bonificaciones.

Esta semana, el primer ministro checo, Jan Fischer, consiguió incluir dicha modificación legal en el programa de la Cámara Baja del mes de marzo, junto a otras disposiciones. Si todo funciona según lo previsto, la petición de los sindicatos del transporte podría ser satisfecha el 10 o el 17 de marzo.

Aunque la huelga es de transporte, esta subida de impuestos afecta a todos los empleados del país, por lo que el paro ha recibido el apoyo del sindicato industrial Kovo y de los empleados de la cultura y la construcción, e incluso de algunas patronales.