El Sparta no logra romper su maldición italiana en Nápoles
El Sparta de Praga no pudo con el favorito y cayó por 1-3 en la cancha del Nápoles en la primera jornada de la fase de grupos de la Europa League. Los praguenses se adelantaron con un golazo de Hušbauer, pero los pupilos de Rafa Benítez remontaron con un tanto de penal materializado por Higuaín y un doblete de Mertens.
Sin embargo, los rojos asustaron a los locales en el minuto 14, al abrir el marcador con un zapatazo a media distancia de Hušbauer que envió el esférico a la red rebotándolo en el palo.
Los Azurri lograron poner tablas en el marcador ocho minutos más tarde cuando Costa paró sin querer un tiro de Callejón con la mano en el área grande. El zimbabuense primero vio la tarjeta amarilla y poco después Gonzalo Higuaín mandó el cuero a la red de penal.
El argentino volvió a tomar la responsabilidad por ejecutar la pena máxima a pesar de que el fin de semana había fallado frente al Chievo en la Serie A italiana lo que el Nápoles terminó pagando caro al caer por la mínima frente a los Asnos Voladores.El guardameta David Bičík admitió que el ex jugador del Real Madrid esta vez chutó muy bien y no le dio ninguna oportunidad para impedir el gol.
“Fue evidente que no dudaba en marcar a pesar de su fallo anterior y, por desgracia, así fue. El domingo chutó medio alto, lo que para un arquero es idóneo. Antes del partido, regaron bastante el césped, así que el balón se deslizaba muy rápidamente. Él chutó fuertemente a ras de suelo, tal tiro es difícil de parar. Si lo hubiera levantado un poco, yo habría tenido más oportunidades de pararlo”, señaló.
Los rivales se fueron al vestuario empatados. Tras el descanso fueron los praguenses quienes estuvieron más cerca de volver a adelantarse. Pero como ni Brabec ni Matějovský lograron empujar el balón a la red, los locales asestaron a los rojos el segundo golpe y otra vez gracias a una jugada de Higuaín, cuyo centro colocó en la red el belga Dries Mertens en el minuto 51.
El entrenador del Sparta, Vítězslav Lavička, indicó que se trató de la jugada esencial de todo el partido.“No es una vergüenza perder contra un equipo de tanta calidad y además jugando en su cancha. Según mi opinión, el momento fundamental sucedió cuando recibimos el segundo gol. Primero Jakub Brabec estuvo cerca de adelantarnos a nosotros, pero poco después Higuaín rodeó precisamente a Brabec y de su centro el Nápoles marcó el tanto que le dio más tranquilidad al final del partido”, dijo.
Como el Sparta no tuvo fuerzas para conseguir por lo menos el empate frente a los partenopeos, Mertens selló la victoria azul a unos nueve minutos para el final de la contienda.
El técnico del Sparta lamentó la derrota, pero subrayó que uno de los partidos más importantes para la posición final del Sparta en el grupo I se jugará la próxima jornada, el 2 de octubre, cuando los checos recibirán en casa al Young Boys suizo, que goleó por 5-0 en casa al Slovan de Bratislava, de Eslovaquia.