El socialdemócrata Bohumil Lausman facilitó el triunfo de los comunistas en Checoslovaquia
En la presente edición les hablaremos sobre el azaroso destino del socialdemócrata checo, Bohumil Lausman, cuya desorientación e ilusiones sobre al Partido Comunista facilitaron el triunfo del totalitarimo en Checoslovaquia. Este año se cumple el centenario del nacimiento de este controvertido político que acabó por ser triturado por la maquinaria del terror comunista
Al iniciarse la ocupación nazi de Bohemia y Moravia, Lausman abandonó a mediados de 1939 el país y por la ruta balcánica, que pasaba por Eslovaquia, Hungría y Yugoslavia, huyó a Occidente. En Londres donde residía el gobierno checoslovaco en exilio, fue nombrado por el presidente Benes miembro del Consejo de Estado.
Bohumil Lausman pertenecía en Londres al círculo de editores de la revista "La Nueva Libertad" que era considerada como el órgano de la izquierda socialdemócrata cuyo izquierdismo consistía en la voluntad declarada de aproximarse a las ideas y objetivos comunistas.
Sus tendencias izquierdistas motivaron el viaje de Lausman a la Unión Soviética, en el año 1942, es decir, en plena guerra. El objetivo que se planteaba consistía en dar un contenido más concreto a la colaboración con la emigración comunista que se había refugiado en Moscú.
Al formarse en 1945 el primer gobierno checoslovaco de posguerra, Bohumil Lausman asumió la cartera de Industria. En 1947 fue elegido presidente del Partido Socialdemócrata, pero tras el golpe comunista, acaecido en febrero de 1948, fue destituído de sus cargos, desempeñándose durante algún tiempo como directivo de segundo rango.
La policía secreta comunista seguía atentamente las actividades de Lausman quien percibió el peligro que se cernía sobre él al ser arrestado su yerno. Cuando los agentes irrumpieron en enero de 1950 en el apartamento de Lausman en Bratislava, éste ya estaba vacío:Bohumil Lausman había huido a Occidente.
Ya en territorio de Alemania Occidental, Lausman pasó varios meses en un centro de refugiados mantenido por Estados Unidos, en las afueras de Francfort. Sin embargo, los exiliados checoslovacos rechazaban a Lausman, ya que su desorientación e ilusiones sobre el Partido Comunista habían facilitado el triunfo de los comunistas en el golpe de febrero de 1948.
El dirigente socialdemócrata fue recibido con simpatía en Yugoslavia adónde fue invitado. Lausman se instaló en Yugoslavia en otoño de 1950 y durante su estancia en ese país proclamó su adhesión a la concepción del socialismo preconizada por el mariscal Tito.
Con el paso del tiempo, se produjo cierto acercamiento entre Lausman y el exilio checoslovaco y el dirigente socialdemócarata empezó a colaborar con la estación Europa Libre. Salió de Yugoslavia para Austria, viviendo primero en Innsbruck y posteriormente en Salzburgo.
El político socialdemócrata era difamado en los discursos de los dirigentes comunistas checoslovacos, y la Seguridad del Estado enviaba agentes al exterior para seguir sus acitivades. Todavía se desconoce en qué circunstancias se tomó la decisión de secuestrarlo y llevarlo a Checoslovaquia.
A finales de los años 40, la policía secreta soviética recurría frecuentemente a este método. Se supone por eso que los asesores soviéticos en Praga y los agentes de la policía secreta soviética, destacados en Austria, ocupada entonces por las tropas soviéticas, jugaron un importantísimo papel en la decisión de secuestrar a Lausman y trasladarlo por la fuerza a la Praga Comunista.
Bohumil Lausman fue secuestrado y traído a Checoslovaquia por los agentes de la policía secreta comunista en el año 1953. Un agente que se decía ser amigo de Lausman, lo visitó en su domicilo, en Salzburgo. Durante una conversación echó en el vaso con la bebida que tomaba Lausman, una sustancia somnífera, siendo ya después fácil raptar al político inconsciente y llevarlo a Checoslovaquia.
Deseando captar la benevolencia de los comunistas, Lausman manifestó arrepentimiento durante los interminables interrogatorios. Por iniciativa propia redactó un informe de 180 páginas en que proporcionó a sus carceleros informaciones detalladas sobre los emigrantes checoslovacos.
Con el objetivo de congraciarse con los comunistas, Lausman escribió en la prisión una serie de estudios seudohistóricos en los que desribía acontecimientos, como el golpe comunista de 1948, la fusión de la socialdemocracia con el Partido Comunista, etc., en un sentido favorable al régimen comunista.
Bohumil Lausman fue secuestrado en 1953, pero su juicio ante el tribunal se escenificó tan sólo en septiembre de 1957, siendo condenado a 17 años de prisión. Debido al sufrimiento síquico padecido en los primeros meses de su reclusión en la prisión de Ruzyne, Lausman perdió 40 kilos de peso.
Bohumil Lausman no fue ni siquiera amnistiado en mayo de 1960 cuando, como resultado del deshielo político fueron puestos en libertad la mayoría de los presos políticos del régimen comunista y falleció en la cárcel el 9 de mayo de 1963.