El Sistema triunfa en Praga y abre puertas para colaboración binacional
El festival La Praga de Dvořák concluyó el sábado tras dos semanas intensas con lo mejor de la música clásica internacional presentándose a diario en distintos escenarios capitalinos, principalmente en el Rudolfinum. Uno de los puntos altos del evento fue el debut en Chequia de la Orquesta Sinfónica Juvenil de Caracas, que forma parte de El Sistema venezolano.
La Fundación del Estado para el Sistema Nacional de las Orquestas Juveniles e Infantiles de Venezuela, conocido simplemente como El Sistema, es responsable de que cerca de medio millón de niños y jóvenes de esa nación no sueñen con ser futbolistas o narcotraficantes, como en otros países de la región, sino que piensen en la música como la carrera a seguir.
El director de la Orquesta Sinfónica Juvenil de Caracas, Dietrich Paredes, ya lo adelantó el viernes en Radio Praga. La idea es que tras este debut en la República Checa, en el festival La Praga de Dvořák, surja una colaboración musical estrecha entre ambos países.“Claro, la idea es volver en un futuro y hacer una orquesta como hace un rato decía el maestro Abreu, una orquesta binacional, con la orquesta del Conservatorio Dvořák, sería ideal eso. Que nuestros músicos venezolanos y los músicos de República Checa se unifiquen en una sola orquesta para hacer música. Eso sería un ejemplo de orquesta para Europa, para el mundo. Sería importantísimo para ambos países poder lograr hacer una orquesta binacional entre la República Checa y Venezuela”.
El responsable del festival La Praga de Dvořák, Vladimír Darjanin, conversó tras el concierto con José Antonio Abreu y el proyecto de colaboración quedó muy avanzado, como informaba este lunes la prensa venezolana. Tanto así que ya se habla de la creación de una orquesta binacional integrada por 100 músicos venezolanos y 100 checos, que se presentaría tanto en Praga como en Caracas en 2014.
Vladimír Darjanin calificó de todo un éxito el concierto brindado por la orquesta venezolana.
“La Sinfónica Juvenil de Caracas es una orquesta juvenil, pero que toca como si fuera una orquesta profesional. Su actuación fue magnífica, el joven maestro Dietrich Paredes tuvo un desempeño excepcional y ahora se une a los grandes directores que se han presentado en este festival. Significó mucho para nosotros tener a una orquesta de El Sistema dentro de la programación, era algo que nuestro público anhelaba. Esperamos seguir teniendo orquestas venezolanas en futuras ediciones”, sostuvo el responsable del festival en un comunicado de prensa.
José Antonio Abreu, de 73 años, el gran responsable de que Venezuela sea sinónimo de música, ya no dirige la orquesta, pero no se pierde ningún detalle organizativo y por eso quiso estar también presente en Praga.“Por supuesto que una gira como esta abarca distintos aspectos, está por ejemplo toda la elección del repertorio, yo participo en la elección, acompaño a los muchachos a los ensayos y a su director. Esta es la Orquesta Juvenil de Caracas, que es parte del sistema nacional de orquestas, y tiene el auspicio de la alcaldía de Caracas, es una orquesta de ciudad, y además de muchachos seleccionados de todas la periferias de Caracas, de procedencia de medianos y bajos recursos”.
Porque El Sistema es mucho más que un proyecto musical, enfatiza el maestro Abreu.
Para el maestro Abreu, es muy importante en estas giras europeas difundir la música latinoamericana y venezolana.
“El momento más adecuado suele ser el momento de los bises en los conciertos, pero también en el programa de los conciertos abarca generalmente una pieza latinoamericana importante. Básicamente en esta gira los bises, en San Petesburgo por ejemplo hubo siete bises, movida por el publico, el cultivo de esa música es por supuesto una prioridad para nosotros. Pero ante todo está el dominio del repertorio sinfónico de todos los tiempos. No encerrarnos en una concesión folclorista porque eso degradaría a la orquesta artísticamente. Ellos tienen que batirse primero en los campos de batallas más exigentes, y luego al mismo tiempo trabajar por cultivar, por enaltecer, por difundir el repertorio latinoamericano, venezolano específicamente”. Y el público europeo recibe con mucho entusiasmo a la orquesta y su repertorio latinoamericano, explica José Antonio Abreu.“La recibe con un entusiasmo y una euforia impresionantes En San Petersburgo yo mismo no pensaba que la reacción iba a ser tan eufórica, prácticamente los acomodadores tuvieron que sacar a la gente porque no querían irse. Y en Ravello por supuesto, porque además se hicieron las oberturas más importantes de Verdi, una música tan familiar a Italia, pero además incluyeron los bises latinoamericanos que fueron arrasadores”.
Eso mismo ocurrió en un Rudolfinum repleto, el viernes, con la orquesta tocando y bailando arriba del escenario los clásicos latinoamericanos y el público aplaudiendo y disfrutando de una velada inolvidable.José Antonio Abreu, considerado un ícono de la cultura venezolana y latinoamericana, dice que aprende mucho de los jóvenes que integran las orquestas de El Sistema.
“Aprendo mucho de ellos, porque ellos están llenos de entusiasmo, de amor por lo que hacen, exentos de inquietudes y de afanes comerciales dedicados exclusivamente a su estudio, a su música. Me recuerdan día a día el tamaño de mi responsabilidad, de mi compromiso, claro que sí”.
La Orquesta Sinfónica Juvenil de Caracas se había presentado en Italia y Rusia antes de llegar a Praga y ahora lo hará en Bélgica, Austria y Alemania.Pero sin duda que sus integrantes y sus dos responsables, el director Paredes y el maestro Abreu, recordarán siempre este debut de El Sistema en la capital checa como uno de los puntos más altos en la exitosa historia de esta compañía.
Porque a todos les hacía mucha ilusión presentarse en Praga, donde hace muchos, muchos años tocó otra gran artista venezolana, Teresa Carreño.