El oso de peluche es protagonista de una exposición en Praga

El osito de peluche es, sin duda, uno de los símbolos de la infancia. Presentar la centenaria historia de este popular juguete es la idea de la exposición Osos, ositos y sus amigos, en el Museo de la Capital de Praga, que proviene de una colección privada.

El oso de felpa fue y sigue siendo uno de los juguetes favoritos de los niños. Con él se acuestan y con él despiertan hace más de cien años. Según fuentes históricas, el oso de peluche “nació” en 1902 en una fábrica de juguetes cerca de la ciudad alemana de Ulm.

Sólo ocho años más tiene el oso más antiguo que figura en la exposición, explicó la coleccionista Alena Doležalová.

“Tengo un oso que data de 1910, lo recibí hace años como regalo de la condesa de Chrást, cerca de Pilsen, en Bohemia Occidental. Es el más antiguo de mi colección que cuenta en total con más de dos mil piezas. Sin embargo, en esta exposición figuran sólo unas 500 figuras de osos de los más diversos tamaños y materiales”, señaló Alena Doležalová.

En las vitrinas lucen osos de diversas épocas del siglo XX. Son fabricados de peluche, textil, celuloide, plástico, madera, cerámica y vidrio. Algunos son mecánicos, se mueven o, por ejemplo, tocan el tambor. Hay osos de la República Checa, Canadá, Alemania o Gran Bretaña.

En una vitrina aparte figuran piezas que la coleccionista recibió de populares personalidades checas, como las cantantes Lucie Bílá y Eva Pilarová, así como de las actrices Helena Růžičková y Květa Fialová, dijo Alena Doležalová.

“Me dedico a la colección de osos desde hace más de 40 años. Durante ese tiempo contribuyeron a mi colección decenas de personas conocidas y también desconocidas. La gente conoce mi afición de entrevistas que hice para los medios de comunicación. Por correo recibo osos, muchas veces en estado bastante deteriorado con la solicitud de repararlo e incluirlo en mi colección. Con amor me dedico a su restauración porque mi profesión original es de costurera”, señaló Alena Doležalová.

La exposición Osos, ositos y sus amigos tiene la meta de contribuir a la atmósfera navideña en la capital checa. Permanecerá abierta en el Museo de la Capital de Praga hasta mediados de febrero de 2008.

Foto: autora