El gobierno congelará o rebajará la subida salarial de los trabajadores del sector público
El nuevo ejecutivo buscará reducir el gasto público congelando o rebajando el salario de los trabajadores estatales. El objetivo sigue siendo reducir la deuda por debajo de los 11 750 millones de euros.
El nuevo gobierno encabezado por Petr Fiala continúa con su firme apuesta por una política económica mucho más austera y la reducción del gasto público. Buena prueba de ello es la congelación del salario de los trabajadores estatales, así como una reducción de los aumentos previamente acordados, unas medidas que fueron anunciadas esta misma semana.
Ya en campaña electoral, Fiala expresó su voluntad de emprender una serie de reformas económicas que redujesen la creciente deuda pública del país por debajo los 11 750 millones de euros. Estas medidas dirigidas a los trabajadores del sector público van encaminadas precisamente en esta dirección.
"Estamos congelando el sueldo de los trabajadores administrativos estatales... y de nosotros mismos", afirmó el ministro de Trabajo y Asuntos Sociales, Marian Jurečka. El Gobierno cifró el ahorro derivado de esta serie de recortes en torno a 200 millones de euros y también anunció que promoverán una ley que congele el sueldo de los políticos.
Con todo, el Gobierno sí aplicará una subida en ciertos sectores. Será, en palabras de Jurečka, en “profesiones clave”, algunas de las cuales han resultado de vital importancia en la gestión y la lucha contra la pandemia, aunque se tratará, más bien, de un gesto y un aumento más simbólico que real. "Encontramos un compromiso para que las profesiones clave en la primera línea, como los servicios sociales y la atención médica, los maestros y las personas en el ejército, aún obtengan algún aumento", afirmó el ministro.
Los maestros obtendrán un aumento salarial del 2% y los trabajadores de servicios sociales y de salud expuestos a la pandemia de coronavirus del 6%. Por su parte, el personal militar y la policía recibirán un aumento de sueldo mensual de 28 euros.
El nuevo gobierno se enfrenta a un panorama económico realmente complejo. La inflación experimentó un crecimiento alarmante en el mes de noviembre, llegando al 6%, mientras que las previsiones de cara al inicio de 2022 es que esta siga aumentando hasta un 8%. Por otro lado, la crisis energética representa otro frente de gran importancia. Respecto a esto, el ministro anunció la intención de expandir los programas de ayuda para los hogares más afectados por las subidas de los precios de la energía.
El comienzo de 2022 se prevé decisivo de cara al rumbo del nuevo ejecutivo. Este, aún sujeto a unos presupuesto provisionales, presentará su propio borrador en el primer trimestre del año.
