El futuro de la acerería de Arcelor Mittal sigue incierto
El futuro del mayor fabricante de acero de la República Checa, Arcelor Mittal Ostrava, sigue preocupando a Gobierno y sindicatos.
Para allanar el camino hacia la aprobación de la operación por parte de la Comisión Europea, Arcelo Mittal ha ofrecido deshacerse de su planta en Ostrava, que emplea actualmente a 7.000 personas.
El ministro de Industria y Comercio, Tomáš Hüner, se reunirá con los representantes de Arcelor este jueves para comentar la situación. Tal como se ha informado en los medios, la planta de Ostrava no es la única en formar parte de un potencial acuerdo sobre Ilva. Las fábricas de Arcelor Mittal en Rumanía, Bélgica y Luxemburgo también se han propuesto como sacrificio. La compañía trata así de calmar los miedos de la Comisión de que Arcelor Mittal pueda tener una proporción del mercado demasiado grande en ciertos productos de acero.
La región de Ostrava se halla todavía en el doloroso proceso de diversificar su economía después de un siglo dedicada al carbón, acero e industria pesada. El ejemplo más claro es el productor de carbón OKD, que trata de sobrevivir después de verse en bancarrota los últimos dos años. Por su parte, el sector de ingeniería, personificado por el grupo Vítkovice, se tiene que enfrentar a diversos problemas económicos. Muchas de sus filiales se han declarado en insolvencia y han sido vendidas.
Con este escenario, el Gobierno checo y las autoridades regionales temen aún más que Arcelor Mittal Ostrava cambie de manos y su futuro se ponga en cuestión de alguna manera. En cualquier caso será complicado encontrar otra compañía que lo compre. Los intentos recientes de venta de la mayor acerería de Eslovaquia, US Steel Kosice, demostraron ser un fracaso.
