El fútbol como herramienta para crear un mundo mejor
La organización checa Fútbol para el Desarrollo (Fotbal pro rozvoj) colabora en una red internacional con el objetivo principal de educar y aportar valores positivos a los niños.
Esto es lo que pensaron en la organización checa Fútbol para el Desarrollo, que ve en el deporte rey un instrumento ideal para transmitir buenos valores a los niños y colaborar con el desarrollo de algunas comunidades en riesgo de exclusión social.
Durante el mes de junio y principios de julio, coincidiendo con el final de las ligas de “Juego Limpio” que se organizan a lo largo del país, miembros de Fútbol para el Desarrollo han recorrido la República Checa junto a trabajadores de otras organizaciones internacionales para realizar numerosas actividades educativas y deportivas.
La visión de esta organización nos la explica más a fondo Kateřina Mlynářová, su coordinadora de Relaciones Públicas.“El proyecto Fotbal pro rozvoj, que en español significa “fútbol para el desarrollo”, es un proyecto que está usando el fútbol como un instrumento para desarrollar a la gente en sus experiencias, que pueden usar no solo en el fútbol, sino más en su vida cotidiana. Lo estamos usando para cambiar a la gente un poco. Nosotros elegimos el fútbol como un instrumento que atrae a mucha gente, es una cosa muy popular”.
Fútbol para el Desarrollo funciona desde el año 2005, y sigue la metodología de otras organizaciones similares que existen en todo el mundo, prosigue Mlynářová.
“Tiene la base en muchos proyectos que funcionan en todo el mundo y que creen que el deporte es un buen instrumento no solo para la actividad física, sino también para alguna actividad mental y algunas otras cosas”.Entre otras actividades, hacen talleres y torneos de fútbol en zonas donde viven jóvenes en riesgo de exclusión social, donde intentan darles la oportunidad de integrarse a través del fútbol.
“En la República Checa lo que más queremos hacer es ir a los lugares que están un poco abandonados, y los chicos jóvenes que están aquí están un poco más fuera de la sociedad y no tienen las condiciones tan fáciles. Nosotros vamos a estos lugares y queremos educar usando el fútbol”.
La red internacional de organizaciones que se dedican a llevar a cabo este tipo de actividades es inmensa. Más de 127 grupos de todo el mundo están inscritos en la red Streetfootballworld, y entre muchas de ellas cooperan con frecuencia, haciendo visitas a otros países para ver cómo se trabaja la metodología en distintas partes del mundo.
Este año, Fútbol para el Desarrollo recibió la visita de sus amigos colombianos de Tiempo de Juego, una organización de características similares, como nos cuenta Kateřina Mlynářová.“Esa red internacional está uniendo a todas las organizaciones por el mundo que están usando el fútbol para educar, para resolver los problemas sociales. En este caso, este año teníamos la posibilidad de cooperar con la organización colombiana Tiempo de Juego”.
Desde Colombia llegaron dos voluntarios a la República Checa con la intención de aportar los conocimientos y las experiencias adquiridas en su país, pero al mismo tiempo, para aprender sobre cómo se llevan a cabo los programas en otros lugares.
Para Richard Garay, voluntario de la fundación Tiempo de Juego, ha sido una grata experiencia. Y explica el sentido de estas actividades.“Ha sido una experiencia maravillosa estar acá en República Checa, porque me puedo dar cuenta de que se trabaja a la par con mi organización. Se utiliza el fútbol como herramienta, como excusa para llamar gente y poderle enseñar algo más, no solo en cuanto a deporte, sino en cuanto a habilidades para la vida, valores. Cosas que los construyan a ellos como personas y les sirvan para la sociedad. Ha sido muy bonito este proyecto porque hemos podido trabajar con distintos chicos, jóvenes e incluso adultos de diferentes lugares de República Checa”.
Como nos indica, el fútbol es una excusa, lo que hay en el fondo es una metodología que puede aplicarse a cualquier campo, y que se centra en la transmisión de valores a los jóvenes, organizando las actividades de forma que se comuniquen entre ellos y se encaminen juntos hacia la aplicación de dichos valores.
Richard Garay señala que en la metodología que utilizan, basada en la de Fútbol 3, hay tres momentos principales.“La fundación creó esa metodología, y se comprenden tres momentos principales. Y no solo se aplica en fútbol, se puede aplicar en otros deportes y en otras cosas de arte. Es muy sencilla. El primer momento siempre es el saludo y la bienvenida a los chicos, se les hace un juego. Se ponen reglas para la clase, acuerdos de convivencia. Luego se pasa en sí al momento principal, que es la clase. El momento en que se relaciona y se tienen que ir desenvolviendo también esos acuerdos. Después se pasa al tercer momento, es donde se hace la retroalimentación, cómo estuvo la clase, donde los chicos evalúan si les gustó, si no les gustó, si se cumplieron los acuerdos”.
Otra de las voluntarias, Zoila Zúñiga, es estudiante de psicología a punto de terminar sus estudios, y nos habla sobre la importancia de generar comunicación y recibir una retroalimentación por parte de los niños y de sus familias.Ante la barrera idiomática que suponía el checo, contaban con la ayuda de los voluntarios locales, que traducían del inglés al checo.
“Nosotros explicábamos las actividades en inglés, y estas personas nos ayudaban a comunicarnos fácilmente con la comunidad en general. Pues los niños y los padres hablaban checo. Hacíamos “workshops”, actividades, juegos muy creativos, didácticos, para motivar a la comunidad. Y después del juego siempre generamos una reflexión. Como preguntarles cómo se sintieron en la actividad, qué pueden aportar ellos, si tienen algún comentario y no les gustó tal cosa, que la comunidad, padres, niños, tengan la oportunidad de expresar eso que ellos no sintieron que estuvo bien”.
Zoila Zúñiga tiene ganas de aplicar en su país todo lo aprendido en esta experiencia. A lo que añade que ha sido maravilloso poder aportar algo a los jóvenes.“Para mí esta experiencia ha sido muy significativa. Porque no solamente vengo a este país para aprender un poco más de la metodología, a profundizar, sino que vengo con conocimientos de mi país, vengo a poner siempre en práctica la parte psicosocial. Hacerle reflexionar a los chicos acerca de la importancia del fútbol, cómo pueden aplicarlo en su vida. Cómo puede el fútbol, ese deporte tan popular, transformar realidades sociales. Para mí, sinceramente, ha sido una experiencia maravillosa”.
Asociaciones como Fútbol para el Desarrollo y Tiempo de Juego apuestan constantemente por el deporte como una manera de mejorar el mundo, e intentan demostrar que más allá de la actividad física y la competición existen unos valores integradores que pueden transformar a los niños en adultos responsables y comprometidos con su entorno.