El estado de emergencia continúa, pero Chequia parece ver una luz al final del túnel
La Cámara de Diputados ha prolongado el estado de emergencia por otros 22 días, pero la situación epidemiológica en Chequia parece propicia a un paulatino levantamiento de las restricciones.
La Cámara de Diputados aprobó este jueves una nueva prórroga del estado de emergencia. El Gobierno de Andrej Babiš solicitaba que fuese prolongado por 30 días, pero no consiguió suficiente apoyo entre los diputados.
El Gobierno recibió fuertes críticas por parte de varios partidos políticos por no presentar datos que evaluaran la eficiencia de las restricciones adoptadas. Finalmente, la Cámara Baja del Parlamento checo coincidió, tras más de ocho horas de debates, en conceder una prórroga hasta el 12 diciembre.
El Gobierno gana así 22 días adicionales para lidiar contra la pandemia del coronavirus. Durante este periodo podrá seguir imponiendo el sistema contra la epidemia PES que, sin el estado de emergencia, se volvería únicamente un compendio de recomendaciones. El ministro de Salud, Jan Blatný, recibió con agrado la luz verde de los diputados.
“Seremos capaces de influir en las medidas y tenerlas bajo control en el periodo antes de Navidad que es cuando, como todos sabemos, la concentración en los comercios es grande. Creo que además de regalos, podríamos llevarnos también una enfermedad”.
En vista de la situación epidemiológica en Chequia que se muestra cada vez mejor, el ministro propondrá al Gobierno este viernes un relajamiento de las restricciones. El país se encuentra actualmente en el nivel 5 del sistema PES, el de mayor riesgo.
No obstante, el número de riesgo declarado por la cartera de Salud baja de manera continua y estable y se sitúa en 62, es decir dentro del límite del nivel 4. Este grado supone un relajamiento de las restricciones y en caso de ser aprobado significaría, por ejemplo, que podrían reunirse hasta seis personas y el toque de queda empezaría a las 23 horas en lugar de las 21 horas actuales.
La situación actual posibilita también el regreso de algunos alumnos a las aulas. A pesar de que el cambio al nivel 4 no ha sido aprobado aún, el ministro de Educación, Robert Plaga, anunció ya la reanudación del aprendizaje presencial para algunos grupos de estudiantes, para que las escuelas, al igual que las familias, tuvieran tiempo para prepararse, según afirmó.
De acuerdo con el diputado Martin Baxa, miembro del comité parlamentario de Ciencia, Educación y Cultura, se trata de una buena noticia, sobre todo para los alumnos más jóvenes.
“Pedíamos que pudieran volver cuanto antes los alumnos que se preparan para exámenes finales o de admisión, es decir los de los últimos grados de educación primaria y secundaria. Es también una buena noticia que puedan regresar los niños que cursan los primeros cinco grados de la escuela primaria, porque la educación a distancia con los alumnos más pequeños es muy complicada y no puede sustituir plenamente al aprendizaje presencial”.
El miércoles 25 de noviembre regresarán a las aulas los alumnos de los últimos grados de educación secundaria. También los estudiantes de los de los años finales de carreras universitarias podrán retomar de manera presencial las clases prácticas, artísticas y de laboratorio.
Los siguientes en volver a las aulas serán los alumnos de primaria. A los cursos de primero y segundo, que regresaron esta semana, se sumarán los alumnos de tercero, cuarto y quinto y también los del último grado de primaria, el noveno. Los demás grados irán alternando, por el momento, entre el aprendizaje presencial y el aprendizaje a distancia.
De acuerdo con el ministro Plaga, el regreso de otros grupos de estudiantes estará vinculado a la situación epidemiológica, más precisamente a si esta permite bajar al nivel 3 del sistema PES.
El 25 de noviembre podrán abrir nuevamente también las escuelas populares de arte (ZUŠ) o las escuelas de idiomas. No obstante, solo podrán ofrecer clases individuales.
