El director de la Bolsa de Praga critica el trato que PPF da a los pequeños accionistas de 02
En el mar de la compraventa de acciones, los más grandes se comen a los pequeños. Una situación que ha tocado techo con los últimos movimientos de la compañía PPF, que el director general de la Bolsa de Valores de Praga ha criticado duramente.
Desde que Kellner compró la participación de Telefónica en O2 el año pasado, su empresa PPF ha dividido la compañía en dos. Los servicios al cliente, por ejemplo, se han quedado en O2. La división, que tuvo lugar el 1 de junio, supuso que alrededor de dos tercios del valor anterior de O2 se pasase a la nueva marca CETIN.
Y desde la absorción por PPF y con la llegada de las “medidas radicales” de Kellner los pequeños accionistas están perdiendo poder a pasos agigantados. La falta de claridad sobre el pasado de PPF y sobre sus intenciones de futuro ha sido la gota que ha colmado el vaso de Koblic, que se ha convertido en abanderado de la causa de los pequeños accionistas.
Koblic criticó en el diario Hospodářské Noviny del viernes que la oferta de compra de participaciones de PPF al resto de accionistas de O2 el año pasado fue tan administrativamente complicada que muchos no pudieron acceder a ella. Desde entonces, bajo la gestión de PPF y las quejas continuas acerca de la divulgación de información sobre los dividendos futuros y la división de la carga de la deuda del pasado de la compañía, las acciones han caído drásticamente. Entre los accionistas crece la sospecha de que todo es una maniobra de PPF para lanzar una compra de acciones a precio de corte sobre los más vulnerables.
De hecho, la estrategia de PPF parece más que sofisticada. Se ha puesto en marcha lo que algunos analistas consideran como una nueva oferta generosa para las acciones Cetin y ésta no es muy atractiva para las acciones de O2. El objetivo claro es conseguir el control total de los activos de infraestructura más atractivos. Maniobras que Koblic critica añadiendo que la reputación de la bolsa checa se ha visto empañada a los ojos de los pequeños inversores gracias a este tipo de comportamientos de los peces grandes.
Un grupo de inversores minoritarios dirigido por Tomas Hájek ya ha presentado una denuncia judicial por, supuestamente, verse injustamente perjudicados por las medidas de PPF. Hájek sostiene que tras la adquisición de PPF, ésta ofrece acciones por valor de 78 y 176 coronas de O2 y de Cetin respectivamente, cuando el precio debería estar más cerca de las 100 y las 200 coronas.