Detenido agresor de periodista checo

La policía checa arrestó a uno de los dos individuos que atacaron en enero al redactor en jefe del semanario Respekt, Tomas Nemecek. Debido a la fuerte golpiza, el periodista debió permanecer varios días en el hospital. Según las autoridades, el agresor, de 25 años de edad, poseía antecedentes penales y ha sido acusado de ataque con violencia y disturbios en la vía pública.

Tras la reconstrucción de los hechos efectuada por los criminalistas se pudo conocer la manera en que fue atacado el periodista, de 30 años de edad: primero le aplicaron en la cara gas lacrimógeno, luego le fueron propinados varios golpes con un bate de béisbol y finalmente fue derribado al suelo. Todo ello frente a su domicilio.

Según Iva Knolová, una portavoz de la Policia checa, "el detenido ya fue identificado como uno de los dos individuos que golpeo brutalmente a Nemecek y no hay duda que se trate de él".

Aunque las razones que motivaron a los delincuentes a golpear al periodista aún se desconocen, Nemecek supone que se trate de una represalia por la publicación de artículos en los que denuncia las actividades de grupos ligados a la mafia en las ciudades de Litvinov y Most. Por esa razón, las autoridades han preferido no entregar mayores detalles acerca del caso y se limitan a señalar que las investigaciones se mantendrán hasta que no sea arrestado el segundo agresor.

No es la primera vez que en la República Checa se registra una situación de agresión o amenaza a profesionales de la información. El año pasado el ex secretario general del Ministerio de RR. EE., karel Srba, preparó el asesinato frustado de la redactora Sabina Slonková, del periódico Mlada Fronta Dnes, lusgo de que publicara artículos que denunciaban las turbias actividades económicas de Srba. Posteriormente un reportero de la TV Checa fue víctima de reiteradas amenazas de muerte, también a raiz de su trabajo.

A pesar del preocupante incremento de la violencia contra periodistas, Tomas Nemecek declaró recientemente a la prensa que "el trabajo de sus colegas no debería estar limitado por acontecimientos aislados como este, ya que desde que se produjeran los cambios democráticos en 1989, jamás había existido en el país tanta libertad de expresión como hoy".