Vltava vuelve a ofrecer en directo su “musiquita”
A los escenarios musicales ha regresado este año el grupo que lleva el nombre del río que pasa por Praga, Vltava. Una de las bandas más peculiares checas vuelve a actuar ante el público tras un paréntesis de siete años.
“El cerdito no tiene hambre, quiere, a lo mejor solo quiere que alguien lo acaricie. No quiere comer para no sufrir hambre durante la noche, sólo no quiere quedarse solo”.
Ese es el estribillo de uno de los mayores éxitos de Vltava que caracteriza bien la obra de esta banda.
Letras de poética juguetona, llenas de humor, ironía y un cante pueril del líder de la banda Robert Nebřenský, cuya interpretación tira a la parodia, son los rasgos característicos de esta banda.
El oyente se da cuenta también del excesivo uso de diminutivos en las letras de Vltava.
El original estilo de la banda ha adquirido muchos fans, pero por otro lado, al igual, hay quienes no la soportan precisamente por su peculiaridad. La música de Vltava da la impresión de reírse de todo y jugar con el oyente. Depende si éste acepta el juego o no, si se deja llevar por el río en el barquito del Capitán Perrito, otro de los grandes éxitos de Vltava.
“En la proa conduce el ciervo, que se ha vuelto de espaldas a la popa, sus ojos son de cristal y gelatina, ¡es él quién te va a divertir!”, sostiene la letra de esta canción.
Vltava surgió en 1986 absorbiendo influencias desde el rock, hasta el reggae, pasando por el jazz, el swing, el blues y el pop, cuya música balancea entre lo original y lo cursi.
A fines de los años noventa, el grupo optó por un sonido más rockero que desembocó en 1998 en la grabación de su mejor disco, titulado ‘Marx, Engels, Beatles’.
La prestigiosa revista musical checa Rock & Pop calificó ese álbum como el segundo mejor disco checo de los años noventa.
Sin embargo, el último disco de estudio de Vltava ‘Cuando los Dioses Envejecen’, editado en 2000, fue recibido mucho peor. Pérdida de energía y una crisis creativa, así hablaron los críticos sobre su último disco de estudio, que preanunció el fin de Vltava, en 2003.
Pero últimamente ha vuelto a tomar aliento para reanudar su actuación anterior, aunque esta vez no contará con la sección de viento, típica para su sonido.
De todas formas, en los conciertos ofrecerá tanto canciones nuevas, como sus viejos éxitos, y los fans esperan que vuelva a editar otro éxito parecido al de ‘Marx, Engels Beatles’.
