Ya les hemos informado sobre el conflicto entre los payos y la minoría gitana en el barrio de Máj en la ciudad de České Budějovice. Para mejorar la situación, la organización caritativa diocesana de la ciudad de České Budějovice organiza varias actividades de ocio destinadas a entretener a los jóvenes habitantes del barrio.
Foto: ČTK
El barrio Máj, en la ciudad de České Budějovice, vivió el sábado pasado una nueva protesta antigitana que terminó con 68 personas detenidas por la Policía. Los problemas de convivencia entre payos y gitanos en el barrio se están haciendo cada vez más problemáticos y se impone la necesidad de solucionarlos inmediatamente. La organización caritativa diocesana de la ciudad de České Budějovice prepara un programa llamado Streetwork. Se trata de una serie de actividades de ocio que dos veces a la semana ayudarán a los niños del barrio a entretenerse durante sus vacaciones, según explica una de las organizadoras del proyecto, Věra Michalicová.
“Preparamos unas actividades muy sencillas. Siempre llevamos unas pelotas para jugar etc. Lo importante es hablar con los niños, contestar sus preguntas y escuchar, cuando ellos mismos quieren decirnos lo que pasa en su casa“.
Foto: Filip Jandourek
El conflicto sucedido en el barrio de Máj puede representar un peligro para las organizaciones sin ánimo de lucro que llevan varios años dedicándose a la integración de los niños gitanos a la sociedad mayoritaria. Según los representantes de dichas organizaciones estas expresiones de odio hacia los gitanos pueden alejarles de los objetivos de su trabajo. Los mayores problemas del barrio, donde junto con unos 20.000 habitantes payos vive también una minoría de 400 gitanos, son el desempleo, las drogas y el aburrimiento de los niños que muchas veces no tienen ningún programa planeado para las vacaciones. A pesar de estos problemas, hay algunos que no encuentran la situación en el barrio tan grave, como uno de los habitantes del barrio de Máj, Tomáš Mařík.
Foto: Filip Jandourek
“Claro, vivir en Máj no es tan idílico como vivir en una aldea pequeña donde todos se conocen. Es un sitio donde se concentra mucha gente en un espacio no muy grande y donde surgen problemas causados por la falta de parques infantiles, ya que hay solo uno para más de 20.000 personas, lo que es muy poco. Pero por lo demás no está tan mal”.
El ayuntamiento de la ciudad planea renovar los espacios públicos en el barrio de Máj y adaptarlos a la vida cotidiana de sus habitantes, sin embargo, su intención es tomar estas decisiones junto con el apoyo de parte de los ciudadanos.
