Un comunista gobernará por primera vez en democracia
El comunista Oldřich Bubeníček ha sido elegido gobernador de la región de Ústí nad Labem, gracias a los votos de su partido y de la Socialdemocracia. Es la primera vez desde que la llegada de la democracia que un comunista mandará en un Gobierno regional.
El Partido Comunista consiguió seis escaños en el Consejo de esa región, que unidos a los cinco de sus socios de coalición, el Partido Socialdemócrata, consiguen la mayoría necesaria.
Bubeníček considera la victoria fruto del trabajo de su formación durante los últimos años.
“Es un momento importante, y por otra parte la valoración del trabajo de nuestros concejales, consejeros regionales, diputados, senadores y eurodiputados. La sociedad ha valorado este trabajo y nos ha dado su confianza en las elecciones regionales”.El primer vicegobernador será el también comunista Stanislav Rybák y la segunda vicegobernadora, la socialdemócrata Jana Vaňhová, que era hasta este martes las gobernadora de la región, y que ahora se hará cargo de la Consejería de Educación.
La sesión de investidura se vio ensombrecida por las críticas de varios de los presentes, que denunciaron que en el recién nombrado Gobierno hay miembros del anterior a quienes consideran responsables en casos de corrupción. A este respecto, Bubeníček promete transparencia en las licitaciones públicas durante su mandato.
Tras las pasadas elecciones regionales, el Partido Comunista ganó en dos de ellas, Ústí nad Labem y Karlovy Vary. En la segunda aún se espera el acuerdo del que saldrá el gobernador.En otras regiones, los comunistas, como segunda fuerza más votada, accederán al Gobierno en coalición con la Socialdemocracia. En tres de ellas, Hradec Králové, Bohemia del Sur y Olomouc, lo harán con el puesto de vicegobernador y consejero de Educación, lo que está levantando ampollas entre la comunidad académica, que no está dudando en convocar concentraciones de protesta.
El éxito sin precedentes del Partido Comunista se achaca a menudo al desencanto de la sociedad con el actual Gobierno de Petr Nečas. Sin embargo, en una encuesta reciente, más de la mitad de la población declaró no tener objeciones con el resultado de las elecciones, ni con el ascenso de los comunistas a los puestos que el resultado de las urnas les otorga.