Un artista no puede escapar de los asuntos políticos
Al cine europeo contemporáneo está dedicada una de las más amplias secciones del Festival de Cine, Televisión y Video, Febiofest, que se celebra en Praga. Entre casi treinta películas destaca la titulada "Me gusta el sonido de la kalashnikov, que me hace recordar a Tchaikovski", de Philippe Vartan Khazarian.
La película no representa un simple resumen de datos y sucesos históricos. Se trata de una peculiar reflexión filosófica sobre la emigración y las consecuencias destructivas de la guerra.
Philippe Vartan Khazarian, que estudió en 1985 en la Universidad de Sevilla, destacó que el rodaje de la película le había costado un trabajo prolongado. Sin embargo, considera que había logrado su meta.
"Creo que he conseguido hacer un autoretrato honesto. La película sobre la que trabajo ahora será más artística. "Gravedad" será un film de ciencia ficción que se sitúa en un futuro muy próximo, donde los elementos naturales han cambiado totalmente la fachada de la Tierra. Los personajes principales son casi todos seres humanos. Se tratará de una película bastante violenta que, sin embargo, incluirá muchas cuestiones metafísicas. Intentaré hacer este film de manera divertida, pero al mismo tiempo hiperrealista. Nosotros, los artistas no somos políticos. Únicamente tratamos de reflexionar sobre lo que sucede en el mundo y en nuestro alrededor. Cada uno en la sociedad tiene su papel. Y yo, como un artista no puedo escapar de los asuntos políticos. Pero no son los únicos en mis películas."
La película "Me gusta el sonido de la kalashnikov, que me hace recordar a Tchaikovski", de Philippe Vartan Khazarian cosechó éxitos en diversos festivales cinematográficos.
