Prohíben el consumo de alcohol durante la sesión de la Cámara Baja
Durante la celebración de las sesiones plenarias de la Cámara Baja checa estará prohibida la venta de alcohol en la sede de esa institución constitucional. La directiva fue emitida este jueves por el presidente de la Cámara de diputados, Jan Hamáček.
”Hemos buscado una analogía con las normas laborales vigentes para los empleados públicos, aunque los diputados no son empleados. Quisimos que fuera posible demandar el cumplimiento de la ‘ley seca’ y que se pueda aplicar alguna sanción a los que la violaran. Mi decisión fue respaldada principalmente por el movimiento ANO y creo que la prohibición del consumo de alcohol durante las sesiones de la Cámara Baja responde a las demandas que me fueron planteadas”.
La ‘ley seca’ es solamente parcial, ya que rige exclusivamente para los bares y restaurantes situados en el edificio donde se celebran las sesiones plenarias de la Cámara de diputados y sólo los días en que éstas tienen lugar. Sin embargo los analistas la consideran de un paso positivo y una buena señal frente a los electores.La vicepresidenta de la Cámara de diputados, Jaroslava Jermanová, del movimiento ANO, confirmó que su formación aplaude la adopción de esa medida.
”Nosotros consideramos que si en cualquier otro centro laboral está prohibido el consumo de alcohol y se adoptan sanciones contra los trabajadores que no lo respetan, no hay motivo alguno para que la misma prohibición no sea aplicada también en el caso de los diputados”.
No todos los diputados sin embargo reaccionaron positivamente a la directiva. Sus adversarios indicaron que se trata de un puro gesto propagandístico de los diputados de los partidos gubernamentales, ya que la prohibición de la venta y consumo de bebidas alcohólicas en los edificios del Parlamento no es absoluta.El jefe de la facción parlamentaria de TOP 09 y ex ministro de Finanzas, Miroslav Kalousek, insiste por su parte en que la ‘ley seca’ afecta a la opinión que puedan tener los ciudadanos sobre la Cámara Baja, ya que insinúa que los diputados son un grupo de borrachos indisciplinados a los que es necesario apartar de ese vicio.